Las cámaras instaladas en senderos en plena naturaleza se activan con el movimiento y brindan información sobre animales que a la luz del día sería prácticamente imposible de conseguir. Es una forma de ver lo que sucede por la noche o simplemente lo que hacen los animales cuando los humanos no están cerca. Muchas veces los que captan suele ser irrelevante, sin embargo, otras veces registran momentos épicos. Repasamos algunos de ellas: