Un baby boom se vive en un hospital de Estados Unidos donde hay 12 enfermeras embarazadas al mismo tiempo y con posibilidades de dar a luz con días o semanas de diferencia. Dos niñas ya llegaron al mundo, una en marzo y otra en mayo.
Las profesionales trabajan en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatal (NICU) del Centro Médico Regional de Riverside (RRMC), quien le está dando la bienvenida a los bebés de diez enfermeras, una enfermera profesional y una secretaria de la unidad.
“Las entregas comenzaron en marzo cuando nació la primera niña, seguida por el bebé número dos, otra niña, en mayo. Los otros no están muy atrás con cuatro esperanzas en julio, tres en agosto, uno en septiembre y la última pequeña arriba en octubre”, posteó el hospital junto a una fotografía de diez de las doce felices madres, dos de ellas con sus recién nacidos en brazos.
«Hay algo en el agua, como algunos dirían», comentó Kaylee Arsenault, gerente de enfermería de la UCI.
Según ella, «históricamente nunca hemos visto tantos miembros del equipo en nuestra unidad embarazadas al mismo tiempo en un año. Estoy emocionada de compartir este tiempo con los miembros de mi equipo y espero celebrarlo ya que cinco de las doce son madres primera vez”.
Sobre el género de los bebés, además de las dos niñas que ya nacieron, se espera el nacimiento de otras seis pequeñas, dos niños y otros dos a los que sus madres prefieren esperar conocer el día que den a luz.
Haley Bradshaw, que tiene 35 semanas de embarazo de su segundo hijo, un niño, habló con TODAY.com y afirmó que “todas nos sentimos extremadamente apoyadas y no tenemos que preocuparnos mucho si alguien necesita algo”.
“Todas estamos aquí para reemplazarnos y ayudar si alguien se toma un descanso o tiene una cita médica. Nos apoyamos la una a la otra”, añadió esta madre que dio a luz a su primer hijo en ese hospital.
Afirma que los pacientes, al ver tantas enfermeras embarazadas, “se ríen con nosotras”.
En la UCI trabajan 52 enfermeras y las que están embarazadas se reparten en los turnos diurno y nocturno para equilibrar el trabajo.
“Trabajamos mejor como equipo porque sabemos lo que nos espera”, sostuvo Jackie Cox, con 36 semanas de embarazo de su quinto hijo, una niña.