Un total de 225 personas han muerto en las carreteras españolas durante el verano de 2022 –en los meses de julio y agosto–, un dato que supone 10 personas más que en el año 2019 –previo a la pandemia–, cuando se registraron 215 fallecidos, y 34 personas más que en 2021, con 191 muertos.
Así lo ha desvelado este lunes 5 de septiembre el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en rueda de prensa desde la sede de la Dirección General de Tráfico.
De este modo, los fallecidos han aumentado un 4,65 por ciento respecto a 2019 y un 17 por ciento respecto a 2021. El número de desplazamientos este verano se ha incrementado un 2,42 por ciento. «Es un mal dato. Un solo muerto en carretera es un precio que no podemos ni debemos asumir», ha sentenciado el ministro del Interior.