El juez de Instrucción número 52 de Madrid ha condenado a una multa de 480 euros al joven de 20 años que el pasado mes de septiembre denunció haber sufrido una falsa agresión homófoba en el barrio de Malasaña, un caso que levantó un gran revuelo social.
El acusado estaba citado esta mañana, a las 9.30 horas, para declarar en calidad de investigado. A las nueve de la mañana ha entrado en dependencias judiciales sin hacer declaraciones.
Tras reconocer los hechos y admitir que mintió a la Policía, el juez ha acordado transformar las diligencias en un juicio por un delito leve, siendo condenado a una multa diario de 4 euros durante cuatro meses.
El delito de simulación de delito, tipificado en el artículo 457 del Código Penal, implica una multa de entre seis y doce meses. Los delitos leves se resuelven ante el juez instructor, dictando sentencia al concluirse la vista.
El joven manifestó el pasado 5 de septiembre en sede policial que ocho encapuchados le habían tatuado en los glúteos la palabra ‘maricón’ con una navaja. El caso levantó una oleada de protestas por la inseguridad del colectivo LGTBi.
La investigación dio un giro por completo después de que confesara a la Policía que interpuso una denuncia simulada. Lo hizo a instancias de su novio, que desconocía lo ocurrido, y para ocultarle que las laceraciones que tenía en el glúteo fueron fruto de una práctica masoquista consentida con otros dos hombres.
El artículo 457 del Código Penal se refiere «al que, ante alguno de los funcionarios señalados en el artículo anterior, simulare ser responsable o víctima de una infracción penal o denunciare una inexistente, provocando actuaciones procesales, será castigado con la multa de seis a doce meses».