Un joven distraído, un ascensor que falla y un momento escalofriante para todos.
Ensimismado en su teléfono móvil , el hombre estuvo a punto de perder la cabeza, de manera literal, cuando el ascensor que iba a utilizar falló.
Todo ocurrió en un abrir y cerrar de ojos, pero sus reflejos le salvaron la vida.
La escena fue captada en un complejo residencial de la ciudad rusa de Krasnodar.