El ciclista francés Julian Alaphilippe (Deceuninck-Quick Step) se llevó este sábado la primera etapa del Tour de Francia, entre Brest y Landerneau sobre 197 kilómetros, en un sprint final autoritario como campeón del mundo, mientras el suspense quedaba siete kilómetros atrás en la segunda de dos graves caídas del pelotón.
Alaphilippe atacó a dos kilómetros de meta, en medio de la ascensión breve pero intensa que decidía el primer ganador y maillot amarillo. El galo venció sin discusión por delante de Michael Matthews (Team BikeExchange) y Primoz Roglic (Jumbo-Visma), podio de un grupo de 50 corredores cortado siete kilómetros antes.
Una dura caída a máxima velocidad cuyas consecuencias están aún por ver y que provocó la segunda montonera del día. A 40 kilómetros de meta, un espectador, en su afán por salir por la tele o en alguna fotografía, metió su cartel y medio cuerpo en la estrecha carretera por la que venía el pelotón. Tony Martin (Jumbo-Visma) fue el primero en chocar y tras él una tremenda montonera.