El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha asegurado que la relación de España con Estados Unidos «es la más estrecha de los últimos 20 años» y ha considerado el acuerdo de la base de Rota un ejemplo de ello.
En una entrevista de ‘La Vanguardia’ este lunes recogida por Europa Press, ha reafirmado la necesidad de aumentar el presupuesto en Defensa y ampliar la base de Rota para responder a amenazas de seguridad y afrontar las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania.
«A mí me parece inconcebible que fuerzas progresistas cuya seña de identidad es la protección de los débiles no comprendan que ahora hay que dar protección a los españoles en dos frentes: las amenazas a su seguridad, que provienen del frente este y también del frente sur, y las consecuencias económicas de la guerra», ha aseverado.
Ha considerado «un éxito de país» la organización de la cumbre de la OTAN celebrada en Madrid y ha destacado que el nuevo Concepto Estratégico señala a Rusia como una amenaza tangible y que –en sus palabras– China no está a ese nivel.
Asimismo, ha remarcado que en la Alianza Atlántica «hay conciencia de lo que puede significar el uso de la inmigración irregular como arma política».
VALLA DE MELILLA
Albares ha calificado lo acontecido en el salto a la valla de Melilla del viernes 24 de junio –en el que fallecieron al menos 23 migrantes– de tragedia humana y ha considerado prácticamente imposible controlar dicha frontera sin la colaboración de la Gendarmería marroquí.
«Le aseguro que las mafias existen», ha aseverado al ser preguntado por si el Gobierno conoce la dinámica exacta de lo ocurrido, y ha dicho esperar a las conclusiones de las investigaciones independientes abiertas en España y Marruecos para establecer responsabilidades.
Ha defendido que «a este Gobierno no se le puede acusar de inestabilidad» y que el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, no conocía todos los extremos de lo ocurrido al comparecer por primera vez.
ENVÍO DE GAS
El ministro ha subrayado la disposición de España a «colaborar con sus vecinos» con el envío de gas –como está haciendo con Marruecos y Francia– mediante proyectos transfronterizos como el gasoducto Midcat.
«Es lo que queremos hacer con las nuevas conexiones transfronterizas y con esa conexión Barcelona-Livorno que ya está inscrita en los planes europeos», ha explicado.
