Como situaciones que pueden parecer insalvables para cualquier empresa, existen escenarios que son síntomas claros de la inminente quiebra de un negocio.
Sin embargo, existen alternativas que pueden ayudar en esta situación, especialmente desde el ámbito legal.
Una de las opciones para una empresa que camina hacia la quiebra es la Ley de Segunda Oportunidad, la cual puede ser una alternativa que brinda, tanto a empresas como a particulares, esa salida que necesitan con urgencia para resolver su endeudamiento. Sin embargo, para ello siempre es recomendable contar con el respaldo de expertos en la materia, como los profesionales de Debify.
Un despacho legal que se expande para sus clientes
Debify es una firma legal con 15 años de trayectoria, la cual ha reunido esfuerzos para facilitar el acceso a los beneficios de la Ley de Segunda Oportunidad a las empresas que lo necesiten. La efectividad de sus servicios los ha llevado a destacar entre aquellos que requieren este servicio, por lo que, ante la creciente demanda de su asistencia legal, han decidido expandirse hacia la localidad de Rubí, en la ciudad de Barcelona, donde han emplazado un despacho a pie de calle para ofrecer más acceso a sus potenciales clientes.
Esta apertura forma parte de las estrategias de crecimiento offline por parte de este despacho legal, a la vez que disponen de un nuevo centro de operaciones, desde el cual ayudan a cualquier empresa que lo necesite en el área de Rubí. Este bufete ayuda a eliminar por completo el endeudamiento de empresas o negocios, de forma ágil y efectiva, dentro de los beneficios que ofrece la Ley de Segunda Oportunidad, los cuales, con la ayuda de Debify, pueden representar un nuevo comienzo para cualquier empresa.
¿Cuáles son los beneficios de la Segunda Oportunidad?
Debify es un despacho legal nacido como una startup especializada en ayudar a las empresas a superar el sobreendeudamiento, especialmente a través de las posibilidades que brinda la Ley de Segunda Oportunidad. Mediante esta herramienta, sus profesionales ayudan a las empresas a obtener una cancelación de deudas que suman hasta cinco millones de euros, objetivo que se puede lograr mediante un acuerdo con los acreedores, o bien, con una orden judicial.
Su despacho tramita con agilidad la solicitud correspondiente a los beneficios de esta Ley, de modo que los beneficiarios pueden resolver su situación financiera en un tiempo promedio de dos meses. Además, durante el proceso trabajan en la paralización de embargos por devengo de intereses. En la negociación con los acreedores, procuran proteger parte del patrimonio de sus clientes en el momento de ofrecer un acuerdo extrajudicial o, en ocasiones, incluso, una vez iniciado el juicio. Todo esto, con el objetivo de proteger, en todo momento, los intereses de aquellos que recurren a sus servicios.