La Audiencia Provincial de Almería acoge este lunes el arranque de la vista oral contra los futbolistas Santi Mina y David Goldar, acusados uno como presunto autor y otro como cooperador necesario de la supuesta agresión sexual a una mujer en junio de 2017 mientras ambos estaban de vacaciones en el municipio costero de Mojácar.
El tribunal de la Sección Tercera encargado de enjuiciar el caso decidirá, tras constituir la sala y antes del inicio del acto de juicio a las 10,00 horas, si atiende, total o parcialmente, la solicitud de la acusación particular para que las tres sesiones señaladas se celebren a puerta cerrada.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), la previsión inicial del tribunal de la Sección Tercera es que el juicio se celebre en audiencia pública, si bien «no se descarta que «alguna sesión o alguna declaración concreta» se lleve a cabo en ausencia tanto de medios de comunicación como de público.
En su escrito de calificación provisional, la acusación particular solicitó que el juicio se celebrase «sin presencia de público, ni de medios de comunicación» en aras de preservar el «derecho a la intimidad» de la víctima.
Por su parte, la Fiscalía, que solo ha formulado acusación contra el jugador del RC Celta de Vigo Santi Mina, ya anunció en su escrito elevado al Juzgado de Instrucción 1 de Vera (Almería) que se mostraría «conforme, en caso de que la perjudicada lo solicitara, con que, al menos su declaración, se celebrase a puerta cerrada para evitar la vulneración de su intimidad».
El Ministerio Público también pidió el acompañamiento en juicio para la víctima por parte de funcionarios del Servicio de Asistencia de Víctimas de Andalucía (SAVA), que su comparecencia se pudiese celebrar por videoconferencia «en caso de solicitarlo» o por «algún otro sistema» capaz «de evitar la confrontación física» con los procesados.
Durante la primera sesión de la vista oral está prevista la declaración de los dos acusados y de cinco testigos, entre ellos la presunta víctima.
La segunda sesión tendrá lugar el día 30 de marzo y en la misma está previsto que declaren en calidad de testigos cinco agentes de la Guardia Civil y tres detectives privados. Este día también prestarán testimonio en calidad de peritos otras tres personas.
En la tercera sesión, fijada para el día 31 de marzo, declararán otras siete personas en calidad de peritos. A continuación las partes expondrán sus informes finales y el juicio quedará visto para sentencia.
El futbolista Santi Mina se enfrenta a una petición del Ministerio Público de ocho años de cárcel como presunto autor de un delito de agresión sexual de los artículos 178 y 179 del Código Penal. Para David Goldar solicitó sobreseimiento, no así la acusación particular, por lo que lo cita a juicio en calidad de testigo.
Al margen de la pena de prisión, el fiscal interesa que se imponga medida de libertad vigilada por periodo de diez años y que se le prohíba acercarse a una distancia inferior a 500 metros a la víctima o comunicarse con ella por el mismo periodo de tiempo.
Por su parte, la acusación particular interesa para ambos acusados penas de nueve años y seis meses de prisión; a Mina lo señala como presunto autor principal mientras que a Goldar lo acusa en calidad de «cooperador necesario».
Remarca para ponderar la pena de cárcel solicitada la «violencia» e «intimidación» ejercida dada ubicación en la que se produjo la presunta agresión, la pertenencia y la superioridad física de ambos.
ESCRITO DE ACUSACIÓN FISCAL
El escrito de calificación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, recoge que Mina, quien milita en la actualidad en el Real Club Celta de Vigo, accedió en la madrugada del 16 de junio de 2017 a una caravana estacionada en las proximidades de una conocida discoteca de Mojácar y en cuyo interior estaban «su amigo», el también futbolista gallego David Goldar, y la mujer.
La Fiscalía sostiene que habría entrado «completamente desnudo» y que, «con ánimo libidinoso para satisfacer su apetito sexual y a pesar de la manifiesta voluntad contraria de la víctima», se habría dirigido a ella diciéndole: ‘Mira, chica, tú me gustas mucho y creo que deberíamos hacer algo’.
Cuando la mujer le contestó que se había ido a la caravana «con David», el escrito recoge que el procesado habría salido «un minuto» para volver a entrar y, tras decirle que «le había gustado mucho», presuntamente perpetró la agresión sexual.
Además de lesiones físicas «a consecuencia» del ataque que el Ministerio Público imputa únicamente a Mina, la víctima sufre sintomatología ansiosa «grave» relacionada con los hechos, por solicita que se le indemnice con 50.000 euros.
Subraya que las secuelas que padece han supuesto que se vea «muy afectada su vida cotidiana» ya que sufre «trastorno de estrés postraumático crónico directamente relacionado» con la agresión sexual que se va a enjuiciar.