La Cumbre de la OTAN ha arrancado oficialmente a las 10.30 horas de este miércoles tras la tradicional foto de familia de los líderes de los 30 países aliados reunidos en Ifema junto al secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
Es la primera imagen que reúne a los 30 aliados en Madrid después del intento fallido de este martes en la cena que ofreció el Rey en el Palacio Real, a la que se ausentaron el propio Stoltenberg y los líderes de Turquía, Suecia y Finlandia, reunidos para cerrar el acuerdo que permitirá la incorporación de estos dos países a la Alianza.
Los presidentes y primeros ministros han ido llegando desde las 8 de la mañana a Ifema. El primero en hacerlo ha sido el líder de la OTAN y tras él Pedro Sánchez, seguidos poco a poco por el resto de mandatarios hasta la llegada del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que ha sido el último en sumarse.
En la foto de familia –con solo cuatro mujeres rodeadas de 27 hombres–, han posado en la parte central el líder de la OTAN con Sánchez a su derecha y Biden a su izquierda. A continuación todos ellos se han dirigido a la sala del Consejo Atlántico donde se celebran estos dos días las sesiones centrales de la Cumbre.
Se trata de una sala de más de 1.700 metros cuadrados con un aforo total de 290 personas, veinte cabinas dobles de interpretación simultánea y una sala de control técnico. Junto a ella hay otra sala destinada a reuniones paralelas de ministros de 1.400 metros cuadrados y aforo de 175 personas, además de una veintena de salas para reuniones bilaterales.
La Cumbre tuvo su primer éxito ya antes de empezar con el visto bueno a la ampliación de la Alianza. Además, Ucrania tendrá una presencia muy especial en la Cumbre pese a que finalmente su presidente, Volodímir Zelenski, no viajará a Madrid, aunque sí que participará a través de videoconferencia en su primera sesión, dedicada precisamente a Ucrania.
También en ella se abordará el famoso Concepto Estratégico que será aprobado y que marca las líneas de acción de la Alianza para los próximos años. España ha puesto especial interés en que este contemple una visión «360 grados» y haga referencia a las amenazas provenientes de
