La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha dejado claro este lunes que no tiene intención de dimitir tras la debacle sufrida por su partido en las elecciones autonómicas catalanas, de la que culpa principalmente a la baja participación de los catalanes constitucionalistas, y también ha descartado la destitución de otros dirigentes de la formación naranja.
«Yo voy a seguir delante de este proyecto, además creo que con un apoyo del partido», ha declarado en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, un día después de que Ciudadanos se quedara con seis escaños en el Parlament y cayera al séptimo puesto, después de haber ganado las elecciones en 2017 con 36 escaños.
Sobre la posibilidad de que alguno de los actuales dirigentes del partido dimita o sea relevado de su cargo, Arrimadas ha contestado: «Creo que si esto solucionara el problema, estaríamos en otro escenario, pero la verdad es que no».
Aunque ha admitido que es «terrible» para Cs haber perdido tantos diputados, ha insistido en que esto era lo previsible ante una participación tan baja, concretamente del 53,42%, que además ha permitido al independentismo salir «totalmente reforzado».