Nuevas simulaciones astrofísicas son las primeras en combinar los efectos físicos de la teoría general de la relatividad de Einstein con modelos realistas de densidad estelar.
Este logro, dirigido por Taeho Ryu, miembro del Instituto Max Planck de Astrofísica, muestra ocho estrellas virtuales que oscilan entre una décima y diez veces la masa del Sol.
Todas han sido modeladas bordeando un agujero negro de un millón de veces la masa del Sol en estas simulaciones de supercomputadoras. A medida que se acercan, todas se estiran y deforman por la gravedad del agujero negro. Algunas se deshacen por completo en una larga corriente de gas, un fenómeno cataclísmico llamado evento de disrupción de marea. Otras solo están parcialmente alteradas, conservando parte de su masa y volviendo a sus formas normales después de sus traumáticos encuentros.
La división entre las estrellas que se rompen por completo y las que perduran no está simplemente relacionada con la masa. En cambio, la supervivencia depende más de la densidad de la estrella, informa el Centro Goddard de la NASA en un comunicado.
Ryu y su equipo también investigaron cómo otras características, como diferentes masas de agujeros negros y enfoques cercanos estelares, afectan los eventos de disrupción de marea. Los resultados ayudarán a los astrónomos a estimar la frecuencia con la que ocurren las disrupciones de marea completas en el universo y les ayudarán a construir imágenes más precisas de estos catastróficos sucesos cósmicos.