La jornada 3 de la máxima competición europea, volvió a dejar un balance más que positivo para los equipos españoles. Únicamente el Atlético de Madrid no fue capaz de llevarse los tres puntos de Rusia, aunque dejó una muy buena imagen y mostró su mejor versión. Los tres restantes se llevaron los tres puntos, aunque tuvieron que sufrir más de lo esperado, ante rivales en un principio asequibles. Nuestros conjuntos comienzan a garantizar su presencia en la siguiente ronda de la Champions League.
Atlético de Madrid VS Lokomotiv (1-1)
El Atlético de Madrid hizo uno de sus mejores partidos de la temporada pero no pudo ganar al Lokomotiv de Moscú (1-1) en la tercera jornada de la Liga de Campeones, después de que el VAR castigase a los rojiblancos con un penalti del ‘nuevo fútbol’, de esos que no ve el árbitro y sí la tecnología, pese a la sensacional actuación de Joao Félix.
Los pupilos de Diego Pablo Simeone seguirán siendo segundos de grupos, pero se quedaron con las ganas de haber logrado una victoria que les hubiese acercado a octavos. No pudo ser pese a los méritos de los colchoneros en su visita a un RZD Arena de Moscú con público, algo más de 8.000 aficionados en un estadio de 27.000 por la pandemia del coronavirus.
El Atleti fue mejor en todas las facetas y dominó de principio a fin. Joao Félix dio continuidad a su estado de forma y firmó una actuación digna del precio que se pagó por él. Correa también estuvo a un buen nivel, siendo la aguja que enhebra el último pase para Luis Suárez, que no acertó con la meta moscovita pese a los múltiples intentos.
Saúl, que estaba de vuelta tras cinco partidos de ausencia, fue el primero en avisar con un latigazo que se fue desviado, un minuto antes de que Giménez inaugurase el marcador con un cabezazo sensacional en la salida de un córner. Héctor Herrera la puso con música al área de castigo y el central uruguayo no lo dudó para poner el 0-1.
El Lokomotiv no había dado señales de vida hasta ese momento y sólo una jugada después al gol de los españoles, el VAR apareció por sorpresa cuando nadie lo reclamó. Un envío de Smolov dio sin querer en la mano de Herrera en su intento por despejar, el árbitro no señaló absolutamente nada, pero el vídeo le dio el chivatazo. Al ver la imagen señaló pena máxima.
Miranchuk, el mejor de los ferroviarios, no falló desde los once metros y ahí terminó toda la producción de los rusos, que sufrieron un larguerazo de Correa y un mano a mano de Luis Suárez en el cuarto de hora final antes del descanso. El triunfo rojiblanco parecía más que evidente, pero en la segunda parte tampoco llegó.
Los de Marko Nikolic, séptimos en la Premier League rusa, se pertrecharon sobre su área y salieron a la contra para intimidar a Oblak sin gran convencimiento. Fue entonces cuando Joao Félix se echó el equipo a la espalda y comenzó a liderar todas las ofensivas. El luso asistió a Suárez en una jugada ‘maradoniana’ y el charrúa remató con confianza, pero el meta local se encontró el balón con fortuna.
A JOAO FÉLIX SÓLO LE FALTÓ EL GOL
Entre tanto, Vitolo tuvo que ser sustituido por lesión cuando no llevaba ni diez minutos sobre el terreno de juego. El Atlético se colocó con orden y también se armó en la medular con la presencia de Koke. El partido era más que notable de los madrileños, que siguieron agarrados a un brillante Joao Félix.
El joven luso lo volvió a intentar con un derechazo al borde de la hora y Suárez no resistió hasta el final y también lo intentó con una volea picada a diez minutos para el 90. El gol no llegó, pese a todos los méritos realizados, y el empate fue un premio menor para un Atlético que seguirá dependiendo de sí mismo.
Real Madrid VS Inter de Milán (3-2)
El Real Madrid arrojó luz a su futuro en la Liga de Campeones tras lograr este martes su primera victoria al imponerse de forma muy sufrida al Inter de Milán italiano por 3-2, en un partido donde estuvo contra las cuerdas y al borde del precipicio tras dejar escapar una ventaja de 2-0.
El conjunto de Zinédine Zidane evitó complicarse la vida gracias a un gol en el minuto 80 de Rodrygo, en lo que fue uno de sus escasos tiros a puerta en una segunda parte donde su rival le superó, pero al que le faltó la puntería que sí tuvo el joven delantero brasileño.
No fue un encuentro brillante de los madridistas, que ni siquiera fueron capaces de controlar el duelo ante los ‘neroazzurri’ cuando se pusieron 2-0 con los tantos de Benzema y Sergio Ramos. Perdió su ventaja y sufrió, pero se llevó tres puntos de oro que le devuelven todas las opciones en la competición.
El partido apenas tuvo control en los primeros 45 minutos. El Real Madrid salió mejor, de nuevo con el 4-3-3 y con Valverde acompañando a Casemiro y Kroos y dejando otra vez en el banco a Modric, y fue el que amenazó de primeras, sobre todo con una buen disparo de Asensio que neutralizó con reflejos Handanovic.
Sin embargo, no logró dominar, principalmente porque los tres medios no consiguieron conectar con el trío de arriba, bien sujetado Hazard por un D’Ambrosio que le seguía allá donde fuera y que apenas le dejaba que se diese la vuelta, lo que también terminó de desconectar en muchos momentos a Benzema, mientras que Asensio no sacaba provecho al buen trabajo por el lado derecho de Lucas Vázquez.
El Inter también se enredaba en errores en su creación, víctima del mal partido de Vidal y Brozovic, y de la poca participación de Barella, su hombre de más talento en esa zona. De todos modos, a los visitantes les quedaba Lautaro Martínez. El argentino, muy solo, libró un bonito duelo con Sergio Ramos y también probó a Courtois para mostrar el peligro ‘neroazzurro’.
Las presiones se imponían y provocaban que el juego apenas tuviera continuidad por ninguno de los dos equipos. En una de ellas, poco después de que un hiperactivo Valverde tuviese otra buena ocasión, Mendy apretó a Achraf, y el exmadridista cometió el error de enviar el balón desde muy lejos a Handanovic. Por allí rondaba un rápido Benzema, que llegó antes que el esloveno para dribrarle y marcar a puerta vacía.
EL INTER EMPATA Y TIENE LAS MEJORES OCASIONES
El 1-0 no cambió el escenario y tampoco el 2-0 que llegó minutos después cuando Sergio Ramos cabeceó inapelable un saque de esquina para celebrar su gol 100 como madridista. Pero los de Zinédine Zidane no acertaron a manejar su renta y permitieron que el Inter se metiese enseguida en el encuentro. Barella dejó muestras de su clase con una dejada de espuela a Lautaro y el ’10’ demostró sus dotes goleadoras para devolver las opciones a los de Antonio Conte.
Tras el descanso, el conjunto italiano tuvo más decisión para buscar el empate y al Real Madrid le continuó costando generar fútbol. Además, en su presión, dejaba espacio a la espalda de su defensa, el mejor argumento para los visitantes para aprovechar la velocidad de Lautaro, Barella y Perisic.
Con el partido en su fase más ‘calmada’ en cuanto a ocasiones, pero con los ‘neroazzurri’ amenazando más, Zidane trató de mejorar el juego de ataque con la entrada del dúo Vinicius y Rodrygo, relevos de Asensio y de un Hazard que sigue buscando ritmo y que jugó muy lejos de donde más peligro puede crear.
Lucas Vázquez tuvo el mejor acercamiento con un ‘punterazo’ que se fue algo desviado de la portería de Handanovic, pero el premio fue para el Inter. Una nueva pérdida en el medio acabó con Lautaro sirviendo a Perisic para que el croata pusiese la igualada y abriese un ‘nuevo’ partido con más urgencias para los locales, a los que el empate no les valía demasiado.
Los de Conte siguieron apretando ante un rival que se iba poco a poco descomponiendo. Ramos se cruzó vital ante Achraf y Lautaro y Perisic rozaron el 2-3 para un equipo muy superior en lo físico. Zidane tiró de Modric, pero fue Valverde y su poderío el que desenredó el entuerto a falta de diez minutos. El uruguayo se deshizo de rivales y metió un balón en profundidad a Vinicius, que en su afán por buscar a Benzema, encontró a Rodrygo, que dio alivio a un sufrimiento que sólo concluyó con el pitido final.
FC Barcelona VS Dinamo de Kiev (2-1)
El FC Barcelona doblegó (2-1) al Dinamo de Kiev con más sufrimiento de lo esperado en la tercera jornada de la Liga de Campeones, para lograr el pleno de victorias en el Grupo G a pesar de un partido poco fiable donde el mejor fue Marc Andre Ter Stegen, quien estrenó su temporada de manera espectacular.
El meta alemán recibió este mismo miércoles el alta médica, mes y medio después de pasar por quirófano, y por la noche formó de titular en el Camp Nou. El regreso de Ter Stegen, justo después del fallo de Neto ante el Alavés, no pudo ser más sonado, con media docena de paradas salvadoras, de gol cantado.
El Barça también atacó y de hecho hizo también héroe a un chaval llamado Neshcheret, sin partidos de profesional y reclutado por Mircea Lucescu ante las múltiples bajas por contagios de la COVID-19. Del inicio en tromba y el gol de Messi de penalti a los cinco minutos, el cuadro local, más favorito si cabe ante el panorama de su rival, dio paso a un juego irregular.
Ronald Koeman se desquició viendo a su equipo conceder, incapaces de mandar ni sentenciar. De nuevo De Jong ejerció de central y de inicio el Barça atacó con todo. Pedri la tuvo y Griezmann también, al ritmo que Neshcheret se lo creía y el Dinamo crecía. El Barça perdió el balón y dejó que el rival comenzara a llegar, como un coladero. A la media hora, Ter Stegen dejó su primer paradón.
El Barça se dio por aludido y dejó otro aluvión de ocasiones, con Messi y Pedri de nuevo rozando el segundo. En la reanudación, más del meta alemán, e incluso un gol visitante anulado porque el balón había salido fuera en el saque de esquina. Otro pie milagroso de Ter Stegen confirmó que el Barça iba a sufrir, con las contras que lanzaba Rodrigues y que frustraba bajo palos el alemán.
Neshcheret también lucía en la otra portería ante Sergi Roberto y volando para evitar el gol de falta de Messi, pero en un descuido de los centrales Piqué puso el 2-0 a centro de Ansu Fati. Entonces, Tsygankov hizo justicia y logró finalmente batir a Ter Stegen y al Barça le quedaron 20 minutos de coquetear con el bochorno que salvan los tres puntos hoy y los 9 en el liderato del grupo.
Sevilla FC VS Krasnodar (3-2)
Un arrebato del marroquí Youssef En-Nesyri en apenas tres minutos permitió al Sevilla conseguir la victoria ante el Krasnodar ruso (3-2) pese a jugar con uno menos por expulsión de Jesús Navas durante toda la segunda mitad del partido disputado en el Ramón Sánchez-Pizjuán, de la tercera jornada de la Liga de Campeones.
El equipo de Julen Lopetegui perdía 0-2 a los 20 minutos, pero no se descompuso. Los de Nervión firmaron un notable ejercicio de paciencia, de fútbol atrevido y de mucha inspiración, toda la que capitalizó el cuestionado En-Nesyri. Sus dos goles de este miércoles harán olvidar aquel fallo en la final de la Supercopa ante el Bayern.
El ex del Lega hizo lo imposible cuando el horizonte más negro pintaba para los andaluces. La noche dio para épica después de que el Krasnodar se encontrase con un botín excesivo a la exposición de sus méritos. Sufrió desde el comienzo el hambre de Ocampos y se libró de un penalti que revisó el VAR por manos de Suleymanov. Sin embargo, el equipo ruso fue quien golpeó primero.
El propio Suleymanov adelantó a los visitantes con una falta magistral desde el borde del área. El Krasnodar aprovechó su momento y encontró el segundo en un penalti que transformó Berg después de que Koundé hiciese tropezar a un rival metiendo la puntera. El penalti y la tarjeta le costaron el cambio al central del Sevilla, que fue sustituido -junto a Escudero- antes del descanso.
Fue entonces cuando el Sevilla, al margen del marcador, recobró las constantes que le hicieron conquistar su sexta Europa League hace tan solo unos meses. Los de Lopetegui sometieron a su rival, décimo en la liga rusa, y recortaron distancias con un cabezazo de Ivan Rakitic tras un centro del talentoso Joan Jordán. Toda la fuerza perdió su efecto con la expulsión de Navas antes de enfilar el túnel de vestuarios.
Sorprendentemente, el Sevilla no acusó el esfuerzo y fue mejor con diez jugadores sobre el verde. Los nervionenses se apoyaron en Óscar Rodríguez para intimidar desde fuera del área y con un remate de Rakitic que terminó en el larguero. Los méritos seguían ahí pese a que los rusos resistiesen con mucha entereza. El portero Safonov hizo otras tres páradas decisivas.
Sin embargo, no pudo detener el afán de En-Nesyri en esos tres minutos de oro para el delantero del Sevilla. Empató el partido tras aprovechar un error de Kaio en la salida del balón -definiendo con mucha clase- y remató su hazaña al hacerse dueño de un rechace en una falta que besó la madera antes de terminar en sus pies. El africano fusiló con mucha rabia.
Los sevillistas cerraron el triunfo con grandes dosis de sacrificio y dejaron muy cerca el billete para los octavos de final de la ‘Champions’. Los de Lopetegui comparten el liderato del grupo E con el Chelsea y sacan seis puntos de ventaja a Rennes y Krasnodar, precisamente su próximo reto en la cuarta jornada el 24 de noviembre.