El reloj de la Real Casa de Correos está «a punto» para dar las campanadas el último día del año desde la Puerta del Sol, según ha señalado el relojero encargado de vigilar su mecanismo cada año, Jesús López Terradas.
Así, ha recordado que la historia de este reloj procede de Losada quien concibió la idea de traerlo a la Villa y Corte de Madrid, tal y como pone en las campanas.
«Se lo autorizan y el 19 de noviembre de 1866, que era el cumple de la Reina Isabel II, se inaugura el funcionamiento del reloj y desde entonces está aquí funcionando, con bastante precisión», ha señalado.
Además, ha precisado que para el mantenimiento del reloj hay que estar pendiente todas las semanas, remontar las pesas que están en su parte más baja y comprobar si los cables están bien. «Revisas toda la máquina, si el aceite está en su punto adecuado, en fin, lo que es reparar una máquina», ha apostillado, según ha informado la Comunidad de Madrid.
«Con relación a la máquina del reloj, lo revisamos todo, pero como venimos todas las semanas lo tenemos todo a punto para esa noche», ha asegurado. Sin embargo, ha informado de que el mecanismo de la bola, como no funciona todo el año, hay que limpiarlo, engrasarlo y probarlo.
Aunque ha indicado que una máquina puede fallar en cualquier momento, ha asegurado que el porcentaje es «prácticamente nulo».
El relojero ha recordado también el procedimiento del día 31 a las 12 de la noche. «Primero va a sonar la bola. Cuando deja de sonar, cuando faltan 20 segundos para las 12, empiezan los cuartos, que son 4 cuartos de 2 campanadas cada uno, son 8 campanadas», ha trasladado, donde ha señalado que muchas personas empiezan a comer uvas y «no hay que hacerlo así».
«Mi deseo, nuestro deseo creo que en general de todos es que primero se den bien las campanadas y, segundo, o primero, es que el Covid se vaya al espacio sideral, a Marte o por ahí, y nos deje en paz, y que funcione bien el reloj», ha expresado López Terradas.
