Australia prohibió TikTok en todos los dispositivos propiedad del gobierno federal por motivos de seguridad, convirtiéndose en el último país aliado de Estados Unidos en tomar medidas contra la aplicación de videos cortos de ByteDance. Esta decisión se basa en la creciente preocupación de que China pueda utilizar la plataforma para recopilar datos de los usuarios con el fin de promover su agenda política, chocando directamente con los intereses de seguridad occidentales.
Según lo que declaró Mark Dreyfus, Fiscal General de Australia, en un comunicado, la prohibición entrará en vigor «tan pronto como sea posible». Además, añadió que sólo se concederían exenciones caso por caso y con las medidas de seguridad adecuadas.
Con la prohibición de Australia, todos los miembros de la llamada red de intercambio de inteligencia de los Cinco Ojos -formada por Australia, Canadá, Estados Unidos, Gran Bretaña y Nueva Zelanda- han prohibido la aplicación en los dispositivos gubernamentales. Francia, Bélgica y la Comisión Europea han anunciado prohibiciones similares.
El Gobierno australiano le pone la cruz a TikTok
TikTok se mostró muy decepcionada por la decisión de Australia, que calificó de «política y no real». Lee Hunter, director general de TikTok para Australia y Nueva Zelanda, afirmó que no se debería señalar a TikTok. «No hay pruebas que sugieran que TikTok sea en modo alguno un riesgo para la seguridad de los australianos y no debe ser tratada de forma diferente a otras plataformas de medios sociales», dijo Hunter en un comunicado.
Shou Zi Chew, director ejecutivo de la compañía, negó repetidamente en su comparecencia ante el Congreso de Estados Unidos el mes pasado que la aplicación comparta datos o tenga conexiones con el Partido Comunista Chino.
El diario australiano The Australian informó a última hora del lunes de que Albanese había aceptado la prohibición tras una revisión del departamento de Interior. Dreyfus confirmó que el gobierno federal había recibido recientemente el informe «Review into Foreign Interference through Social Media Applications» y que sus recomendaciones seguían siendo objeto de estudio.
La crítica situación política de TikTok se agrava
La prohibición se produce el mismo día en que funcionarios australianos y chinos mantuvieron conversaciones en Pekín en un intento de normalizar el comercio, mientras la Organización Mundial del Comercio se prepara para hacer públicas las conclusiones de una queja australiana sobre los aranceles a la cebada.
«Las cosas van bien, pero, por supuesto, tomará algún tiempo darle la vuelta a este barco», dijo Don Farrell, ministro australiano de Comercio, a Sky News para referirse a las perspectivas de mejorar las relaciones comerciales. En 2018, Australia prohibió a la firma china Huawei suministrar equipos durante el despliegue de su red 5G, lo que causó tención con el gigante asiático. Los lazos se debilitaron aún más después de que Canberra pidiera una investigación independiente sobre el origen del COVID-19 a lo que China respondió imponiendo aranceles a las materias primas australianas.
Los legisladores australianos pueden seguir usando TikTok en sus teléfonos personales, pero algunos como Bill Shorten -ministro federal de Servicios del Gobierno- y el primer ministro del estado de Victoria, Daniel Andrews, han decidido eliminar sus cuentas. El estado de Victoria también prohibirá la aplicación en los teléfonos propiedad del gobierno estatal, según declaró un portavoz a la agencia Reuters.
Mientras TikTok se ve sometida a una creciente presión por la posible influencia china en la plataforma, también se enfrenta a críticas por su influencia en los niños. TikTok ha declarado que la administración de Joe Biden exigió a sus propietarios chinos que se desprendieran de sus participaciones o se enfrentarían a una posible prohibición estadounidense.