Bertín Osborne llegó a establecer su residencia en Luxemburgo y cedió sus derechos de contratación a una sociedad instrumental panameña para eludir a Hacienda, según ha informado El Confidencial. El medio ha tenido acceso a documentación de la investigación que permanece abierta por el Juzgado Central número 5 de la Audiencia Nacional.
Los documentos que afectan a Osborne comprenden periodo de 2000-2006, por lo que los hechos ya habrían prescritos, aunque Agencia Tributaria los continúa analizando y no se descarta la aparición de nuevas irregularidades.
El presentador y cantante ha reconocido a ‘El Confidencia’l que fue cliente de Arespacochaga: «Ese fue el mayor error de mi vida, hace más de 20 años: fiarme de un asesor fiscal (Arespacochaga) mientras yo vivía en Estados Unidos. Ya pagué por aquel error más de cinco millones de euros y fue juzgado por ello. Espero no tener que pasar por un segundo juicio 20 años después», ha afirmado al medio en cuestión en una conversación telefónica.
Osborne fue ayudado por el gestor Joaquín Arespacochaga Llópiz, experto en la creación de entramados offshore.La información sobre Osborne fue encontrada por la Policía Nacional en 2013 en el despacho de Arespacochaga y ha sido remitida al Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia, que mantiene abierta desde 2016 la red Charisma (una trama de gestores fiscales que evadió dinero de 500 fortunas españolas).
Según El Confidencial, Hacienda comenzó a reclamar al presentador varios importes correspondientes a su declaración de la renta en los primeros años del siglo. La deuda tenía su origen en la presunta derivación de parte de sus ingresos profesionales a sociedades mercantiles de su entorno que actuaban como pantalla.
En la informaciónse señala que en 1998 el presentador adquirió el 100% de las acciones de una sociedad panameña, Canterbury Operations SA, por un valor de 250.000 dólares. Osborne cedió a la sociedad sus derechos de «representación artística» para que todos sus ingresos profesionales pasaran por ella.
El cantante fijó ese contrato de cesión de derechos en calidad de residente en Luxemburgo, y mantuvo un alojamiento allí como residencia oficial desde 1998 y 2002.