El Real Betis comenzó con buen pie su andadura por segundo año consecutivo en la Liga Europa, gracias a su trabajada victoria (0-2) de este jueves en su visita al modesto Helsinki finlandés, con William José de protagonista y la mala noticia de la lesión de Juanmi.
El conjunto verdiblanco, que el año pasado no pudo pasar de los octavos de final ante el Eintracht, supo sacar tres puntos claves en un campo complicado, con el siempre incómodo césped artificial, y donde le bastó su mayor superioridad y acertar en las pocas ocasiones que tuvo.
Y eso que el choque no comenzó bien para Manuel Pellegrini, que vio como el único de los titulares que repetía respecto a la derrota con el Real Madrid, Juanmi, caía lesionado tras un mal apoyo del tobillo. Este percance y la gran cantidad de rotaciones no ayudó a los béticos, aunque en el campo tenían jugadores de nivel como William Carvalho, que retornaba, Willian José, el veterano Joaquín o el central Pezzella.
El Betis, de todos modos, controló sin excesivos problemas las acometidas de los locales, aunque también le costó generar ocasiones de gol. La primera, un disparo de Rodri, lo repelió bien Hazard, mientras que Carvalho se topó con el larguero. Justo antes del descanso, el colegiado decretó penalti y Willian José no perdonó.
El Helsinki, impulsado por Browne, volvió de los vestuarios con más empeño y los visitantes pasaron minutos complicados, aunque con pocos sustos para Claudio Bravo. Pellegrini buscó más calidad y calma con la entrada de Sergio Canales, y poco después, tras un saque de esquina embarullado, Willian José recogió un balón perdido y remachó el 0-2.
El equipo finlandés estuvo cerca de coger aire a continuación, pero el VAR anuló el tanto de Abubakari y el Betis, ya con más espacios, no acertó a sentenciar definitivamente, sobre todo en una clara ocasión de su goleador, que perdió una buena opción para hacer el triplete.
EL VILLARREAL SUFRE
Por su parte, el Villarrealtambién se estrenó este jueves en la fase de grupos de la Conference League 2022-2023 con una sufrida victoria por 4-3 en el Ciutat de València ante un competitivo Lech Poznan polaco, que sólo claudicó en los compases finales por un gol de Francis Coquelin.
El ‘Submarino Amarillo’ ya comprobó que pese a su teórica superioridad a muchos de sus rivales en la tercera competición europea de clubes, en Europa deberá tener los cinco sentidos puestos para evitar sustos si quiere llegar lejos.
Unai Emery, como estaba previsto, modificó todo su once respecto al pasado domingo ante el Elche y dio oportunidades a los menos habituales, pero ya desde el principio se encontró con un duelo complejo. Un error en el área del canterano Adrián De la Fuente le dio los visitantes la delantera en el marcador por medio de Skoras a los dos minutos.
El Villarreal se lanzó rápidamente a por el empate, pero le costó encontrar el ritmo y fútbol que ofrece en LaLiga Santander. Aún así, su dominio encontró premio en un eficaz tramo final de primer tiempo donde Samu Chuwkueze y Alex Baena, por partida doble, entre el 32 y el 40, voltearon el marcador y parecieron dejar el choque sentenciado.
Sin embargo, el Lech Poznan no se quiso dar por vencido y contra todo pronóstico fue capaz de volver a igualar el partido. El conjunto castellonense no salió centrado y un penalti por mano de Mandi lo aprovechó Ishak para recortar en el 47. El delantero premió el empuje visitante pasada la hora de juego para batir a Jorgensen tras un gran pase de Skoras y demostrar que la fiabilidad defensiva de la Liga debe trasladarse a Europa.
Emery reaccionó metiendo en el campo a Gerard Moreno y Dani Parejo y aunque recuperó el control, no gozó de demasiadas ocasiones. Finalmente, cuando el reloj se disponía a marcar el minuto 90, Coquelin volvió a demostrar su buen disparo para dejar la victoria y los tres puntos en casa.