Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Equipo de Policía Judicial del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, han desmantelado una organización criminal, en el marco de la operación ‘Metal Cars’, que ha culminado con la detención de los ocho integrantes del grupo y la intervención de 30 kilogramos de ‘cocaína negra’, ha informado este miércoles la Comandancia de Madrid en una nota de prensa.
El inicio de la operación tuvo lugar a principios de año, cuando los agentes que han desarrollado la investigación detectaron un envío con piezas de vehículos usados procedente de Costa Rica, centrando las indagaciones en la empresa importadora de las piezas.
El estudio mercantil permitió identificar a los titulares de la empresa, todos ellos de origen sudamericano, quienes supuestamente se dedicaban a la importación y posterior venta de piezas de vehículo, algo por lo que estarían pagando más dinero que si adquirieran esas piezas en territorio español o europeo.
Los análisis posteriores permitieron ubicar una nueva partida, la cual realizó varias escalas antes de llegar al aeropuerto madrileño.
Los agentes inspeccionaron la mercancía y recogieron muestras del caucho de las piezas que llegaban a España, remitiéndolo al laboratorio de criminalística de la Guardia Civil para su análisis. Los resultados de los análisis propiciaron la explotación de la operación, la cual ha sido dirigida por la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Madrid.
En la misma resultaron detenidos los receptores de la mercancía, los dos administradores de la empresa, dos personas más en un piso del madrileño distrito de Ciudad Lineal que era el centro de operaciones del grupo, donde además se localizaron dosis de cocaína dispuestas para su venta, básculas de precisión y sustancias para el corte de la droga. Ello también propició la detención de la mujer encargada de la custodia y la venta de la sustancia.
Se trata de la llamada ‘cocaína negra’, una mezcla regular de pasta base de cocaína o clorhidrato de cocaína con varias otras sustancias. Su objetivo es para camuflar la apariencia típica (pigmentos y tintes, por ejemplo, carbón), interferir con las pruebas de drogas basadas en color y que la mezcla sea indetectable con perros que olfatean drogas.
Dada la complejidad del los elementos silenciadores de los vehículos, fabricados con caucho y cocaína, los guardias civiles solicitaron ayuda al grupo de bomberos del aeropuerto madrileño, logrando extraer 30 kilogramos de cocaína que se encontraban ocultos en la partida comercial.
Los detenidos son siete hombres y una mujer con edades comprendidas entre los 19 y los 55 años, y de nacionalidad dominicana, peruana y venezolana. Se les atribuyen delitos contra la salud pública, tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Tras su puesta a disposición judicial han ingresado en prisión seis de ellos y los dos restantes fueron han quedado en libertad con cargos.