La saga de videojuegos bélicos Call of Duty ha suspendido cerca de 50.000 cuentas de jugadores en un solo día por hacer trampas en su última entrega, Call of Duty: Vanguard, así como en su versión en línea Warzone.
Gracias al uso de Ricochet, un sistema antitrampas que Call of Duty comenzó a desplegar a primeros de diciembre, la saga de videojuegos fue capaz de bloquear 48.000 cuentas de jugadores que hacían trampas, como ha anunciado su cuenta oficial de Twitter.
La cifra de cuentas bloqueadas se produjo durante solamente un día: el pasado martes, 21 de diciembre. Call of Duty lanzó Ricochet en Asia-Pacífico el 7 de diciembre, y una semana después ya estaba en funcionamiento en todo el mundo.
Ricochet, que funciona en la última entrega de la saga, Vanguard, y su versión en línea Warzone, es una herramienta que funciona a nivel de kernel, con más privilegios que los sistemas tradicionales de este tipo.
Gracias al uso del sistema, la desarrolladora puede llevar a cabo investigaciones más en profundidad y conocer, por ejemplo, las aplicaciones que intentan interactuar con el videojuego potencialmente para hacer trampas. El sistema usa los datos para mejorar sus funciones de detección inteligente.