El Real Madrid cayó (4-0) este miércoles ante el Manchester City en la vuelta de semifinales de la Liga de Campeones celebrada en el Etihad, eliminado el campeón en búsqueda de la final de Estambul por un rival motivado, con ganas de revancha y mucha calidad que supo sacar para citarse con el Inter de Milán el 10 de junio.
Los de Pep Guardiola, derrotados el año pasado en ‘semis’ por los de Carlo Ancelotti, alcanzaron la segunda final ‘Champions’ de la historia del club con un doblete de Bernardo Silva en el primer tiempo, otro tanto de Militao en propia puerta ya en el segundo y el broche de Julián Álvarez en el 91′. Un Madrid irreconocible, mal Modric con hasta 11 pérdidas y sin noticias de Vinicius y Benzema, se vio muy superado por el plan inglés.
El hambre del eterno aspirante pudo más que los galones del infinito campeón en un puesta en escena local, primer tiempo inglés de arriba a abajo. Desde el inicio, el City apretó de lo lindo, aculó al Madrid en su campo y generó peligro, solo frenado por un Courtois salvador, con dos paradones a Haaland.
El meta visitante le sacó con el costado un cabezazo a cuatro palmos en el minuto 13 y, diez después, se estiró al máximo para repeler con los dedos otro testarazo. La situación era insostenible para los de Ancelotti, con todo el City mostrando inspiración y calidad en cada jugada. La presión local ayudó a una sensación de peligro aún mayor, bajo la batuta de De Bruyne, Gündogan y Rodrigo.
El Madrid no jugó en bloque, no devolvió esa presión, y se vio a merced de los ingleses, hasta que el belga encontró a Bernardo Silva con autopista para engañar a la tercera a Courtois (1-0). En una jugada ensayada a saque de esquina, Haaland volvió a topar con el meta blanco, con cierta ansia ya en las siguientes jugadas.
El equipo español salió de la cueva pasada la media hora y encontró la primera carrera de Vinicius, superado por Walker. Todo funcionaba en los de Guardiola, incluso la pizca de suerte para que el Madrid no marcase la primera. Kroos buscó la vía rápida y mando un misil al larguero, pero la mitad terminó con el guion local.
EL MADRID SE DESPIDE SIN OPCIÓN DE ÉPICA
La posesión del City hundió de nuevo a su rival, a merced de continuas internadas de segunda línea, como la de Gündogan en el minuto 37, que dejó un balón rebotado para el cabezazo hábil de Silva en el 2-0. El portugués inició la traca final, robando arriba el equipo de Guardiola en un asedio total. El Madrid aguantó sin mayor daño y, lógicamente, mejoró en la reanudación.
Benzema rompió el letargo ofensivo de los suyos ofreciendo alternativas por dentro, con algo de posesión visitante. El City pareció no tener claro el plan tras el descanso, ni presionó ni defendió, pero tampoco tuvo trabajo Ederson más allá de una falta directa de Alaba. Los de Guardiola confiaron en encontrar huecos, en una contra letal, pero tampoco se acercó la sentencia.
El destino estaba por escribirse, con la sensación de dominio aún en el City pero con los minutos de épica por delante. Con los fantasmas de la eliminación el año pasado a manos del Madrid o las mil historias de remontadas blancas, el miedo no llegó a los celestes, ni la obsesión europea jugó malas pasadas. Para tranquilidad inglesa, Militao se hizo el 3-0 en propia puerta y, con 15 minutos para el final, los blancos no encontraron fe.
Quizá bastaba con un gol, pero Ederson quiso estar a la altura del resto del City, y detuvo a Benzema y Ceballos, desde el suelo y a bocajarro, en la misma jugada. Solo faltó el gol de Haaland, negado por Courtois una vez más, pero metió Julián Álvarez por él, con su primera ocasión, en el descuento. Un 4-0 que no encajaba el Madrid desde 2009 ante el Liverpool, para que Guardiola busque su Champions con el City y el Madrid piense en el futuro.