El Sevilla FC viaja este martes al Signal Iduna Park para enfrentarse al Borussia Dortmund, en un duelo de la cuarta jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones marcado por la oportunidad de los hispalenses de reengancharse a una segunda plaza que ocupan los alemanes, y que tratarán de consolidar con antelación.
En un grupo en el que el Manchester City tiene a tiro la clasificación, con un pleno de victorias, ese segundo billete para los octavos de final apunta a Dortmund. Los de Edin Terzic, con 6 puntos, lo tienen reservado pero no atado. Por ello, el Sevilla, con tan sólo una unidad, nunca se rinde y no desiste en un objetivo cada jornada más complicado.
Una victoria a domicilio añadiría presión a un grupo que, por contra, podría dejar sentenciado los puestos de la máxima competición continental, con la plaza de Liga Europa únicamente por disputar entre Sevilla y Copenhague. Pero Jorge Sampaoli sueña alto y quiere convertirse en el catalizador que necesita Nervión en su regreso.
El técnico argentino volvió a sentarse en el banquillo del cuadro andaluz este sábado, tras hacerlo en la temporada 2016/17, y se estrenó en su nueva etapa con un empate sufrido ante el Ahtletic Club. Se vieron algunos brotes verdes, especialmente en los primeros minutos, pero acabó pareciéndose al de otros días y conservando un punto por la gran cantidad de ocasiones falladas por los vascos.
Ahora está por ver si serán capaces de mostrar una cara totalmente distinta a la del último encuentro de ‘Champions’ ante el Borussia, que ‘despidió’ a Julen Lopetegui al pasar como un ciclón por Pizjuán y endosar un 1-4 a los hispalenses. Una abultada derrota que condenó al entrenador vasco y, prácticamente, al Sevilla en Liga de Campeones.
El cuadro andaluz no podrá contar con Óliver Torres, autor del primer y hasta ahora único gol de la segunda era Sampaoli, al no estar inscrito en la ‘Champions’. Otra de las bajas esenciales será la del centrocampista brasileño Fernando Reges, quien sigue sin estar disponible para su nuevo entrenador.
La buena noticia es el estado físico de su compatriota Marcao, una incorporación que Lopetegui no pudo utilizar al estar lesionado desde inicio de temporada y que debutó, precisamente, ya a las órdenes de Sampaoli.
En frente, el Dortmund llega a la cita entonado con un empate de nivel ante el Bayern de Múnich. De hecho, los ‘borussers’ evidenciaron la fortaleza de su ‘fortín’, quien creyó en los suyos hasta el final pese a ir perdiendo 0-2 a la hora de juego. Sin embargo, Youssoufa Moukoko, quien firmó dos asistencias contra el Sevilla, recortó distancias en el 73′ y Modeste en el 90+5′ logró el empate definitivo.
Un punto que les permite mantener la igualdad en la tabla con los bávaros, ambos con 16 en la tercera y cuarta plaza de la Bundesliga respectivamente. Ahora, con la mentalidad puesta en ‘Champions’, quieren aligerar su calendario, en el que se jugarán la DFB-Pokal en próximo 19 de octubre ante el Hannover 96.
El cuadro renano ha basado sus opciones en un bloque compacto ante la baja fundamental del capitán Marco Reus. No obstante, esta vez recuperan al central Matts Hummels, que se perdió el duelo en el Pizjuán el pasado miércoles por un resfriado, y a Giovanni Reyna y Thomas Meunier.
En la delantera, el joven Moukoko, con 17 años, apunta como líder de un ataque junto Adeyemi y Brandt. En la medular, Bellingham, a sus 19 años, se ha convertido en el faro de su equipo y estará acompañado por Emre Can y Ozcan, mientras que en defensa Hummels volverá a liderar la zaga, por lo que Süle y Schlotterbeck pugnarán por la otra plaza.
En la portería, Gregor Kobel también apunta al once inicial por primera vez desde principios de septiembre: «Es nuestro número 1. En cuanto nos indique que está al cien por cien, volverá», explicó Edin Terzic.