Ciudadanos ha firmado este domingo su defunción al no lograr mantener ningún diputado en el Parlamento europeo tras los comicios celebrados este domingo, por lo que la formación encadena un nuevo fracaso electoral que lleva al partido a la práctica desaparición, al haber perdido representantes en todas las instituciones.
Los ‘naranjas’ han obtenido algo más de 120.500 votos, sin lograr ningún asiento en el Europarlamento y por detrás de partidos como Pacma, Ceus y Junts. Se trata de una caída considerable de apoyos respecto a los comicios de hace cinco años, cuando consiguió el respaldo de 2.726.642 votantes. Es también otro varapalo electoral justo un mes después de las elecciones en Cataluña, la comunidad en la que nació, donde quedó fuera del Parlament al perder los seis escaños que mantenía y sumar apenas unos 20.000 apoyos.
Ciudadanos logró en las elecciones europeas de 2019 sus mejores resultados en esta cita electoral, al aglutinar el 12,17% de los votos y siete escaños. Entonces el candidato fue el economista Luis Garicano, que en 2022 dejó el Parlamento europeo y se incorporó después a la fundación ‘Reformismo21’ del Partido Popular. Sin embargo, no fue el único de aquella lista que se sumó al equipo de Feijóo. De hecho, el eurodiputado y ex secretario general de CS, Adrián Vázquez, va en la lista del PP el 9J, al igual que Susana Solís y Eva-María Poptcheva.
La candidatura que encabezaba Jordi Cañas, y que cerró la exvicealcaldesa de Madrid Begoña Villacís de manera simbólica, enfocó la campaña del 9J en clave europea, insistiendo en que las elecciones no versaban sobre un plebiscito de Pedro Sánchez (PSOE) o Alberto Núñez Feijóo (PP), sino sobre el futuro de Europa y apostó por tratar «como adultos» a los ciudadanos para «hablar de sus problemas». Además, apelaba a sus exvotantes para que volvieran a votar al partido y confiaba en que si mantenía representación en la Eurocámara significaría el «principio del renacimiento» de Ciudadanos.
También aprovechó las dos semanas de campaña para defender la labor de Ciudadanos en el Parlamento europeo, dentro del grupo parlamentario de los liberales Renew Europe, denunciando la ley de amnistía pactada por el Gobierno de Pedro Sánchez con partidos independentistas o afeando al PP cualquier hipotético acercamiento con Junts+.
Era la cuarta vez que Ciudadanos se presentaba a los comicios europeos. Esta formación nació en 2006 e irrumpió en el Parlament catalán con tres escaños como fuerza política cuyo objetivo era combatir el nacionalismo catalán. Dos años después, en 2008, fue su primer intento sin éxito en unas elecciones generales. En 2009, el partido entonces liderado por Albert Rivera probó suerte en Europa y se presentó con el abogado extremeño Miguel Durán como candidato en coalición junto a Libertas, recabando solo 22.903 votos y sin lograr representación.
Fue en 2014 cuando Ciudadanos logró entrar por primera en la Eurocámara con más del 3% de los votos y dos eurodiputados: su cabeza de lista, Javier Nart –ha repetido como independiente y va número dos en la lista del 9J– y Juan Carlos Girauta, que saltó ahora a Vox como candidato europeo tras darse de baja de CS.
NOVIEMBRE DE 2019, INICIO DEL DECLIVE
En 2019, Ciudadanos alcanzó sus máximas cuotas de poder institucional pero, paradójicamente, también inició su camino a la irrelevancia. Aquel año, en las generales de abril, el partido con Rivera de candidato consiguió ser la tercera fuerza nacional con 57 escaños y más de 3 millones de votos, a unos 200.000 y ocho diputados de superar al PP de Pablo Casado.
Un mes después, el 26 de mayo de 2019, Ciudadanos logró sus mejores marcas históricas en unas elecciones autonómicas y municipales. Entró a gobernar en coalición con el PP en la Región de Murcia, la Comunidad de Madrid y Castilla y León. A estas autonomías se sumaba Andalucía con Juan Marín, que también se convirtió en el vicepresidente de Juanma Moreno tras los comicios de 2018. Además, Ciutadans era la primer fuerza política en el Parlament catalán con 36 escaños. En Ciudad Real y Palencia consiguieron el bastón de mando de la Alcaldía y en la ciudad de Madrid, entre otras, Begoña Villacís fue la vicealcaldesa tras un pacto con los ‘populares’.
Los años dorados de Ciudadanos comenzaron a agotarse tras la repetición de las elecciones generales del 10 de noviembre de 2019, cuando los electores retiraron súbitamente su apoyo a Albert Rivera, a pesar de que algunas encuestas les pronosticaban un ‘sorpasso’ al PP. No sólo no superó a los ‘populares’, sino que sufrió un duro golpe: perdió 2,5 millones de votos y únicamente obtuvo diez escaños. El batacazo llevó a Rivera a dimitir.
NEGOCIACIÓN FRACASADA CON EL PP
Tras el hundimiento de Rivera, el declive de Ciudadanos se pronunció al dejarse un millón de votos y 30 escaños en las elecciones catalanas de febrero de 2021. De liderar la Cámara autonómica pasaron a ser la séptima fuerza, con unos seis diputados. Poco después llegó la fallida moción de censura que los ‘naranjas’ acordaron con el PSOE en Murcia para desalojar al ‘popular’ Fernando López Miras. Como consecuencia, fueron expulsados de los ejecutivos autonómicos que compartían con el PP en Castilla y León y Madrid, donde se adelantaron las elecciones y CS perdió toda su representación en la Asamblea regional.
La siguiente cita con las urnas fueron las elecciones de Andalucía en 2022, que certificaron la expulsión de Ciudadanos del Parlamento autonómico después de haber entrado en el gobierno regional, en virtud de un acuerdo con el PP. El descalabro aceleró los planes de los ‘naranjas’ para poner en marcha un proceso de refundación que la formación ya tenía en mente, con unas primarias que mostraron las costuras de Ciudadanos. El portavoz adjunto, Edmundo Bal, se enfrentó a la lista amadrinada por Inés Arrimadas, con el ‘ticket’ Adrián Vázquez y Patricia Guasp a la cabeza, a la postre ganadora del proceso. La VI Asamblea General fue un intento de cerrar la crisis, pero desde entonces Ciudadanos vivió en una constante calma tensa.
Así llegaron las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo de 2023, otro fracaso para Ciudadanos: desaparecieron de todos los parlamentos autonómicos en liza y perdieron al 85% de sus concejales, además de relevantes plazas como la Vicealcaldía en el Ayuntamiento de Madrid.
El hundimiento llevó a entonces la portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Inés Arrimadas, a abandonar la política. También se decidió no presentarse a las elecciones generales del 23J, ni a las últimos comicios gallegos ni vascos de 2024, para centrarse Europa y en Cataluña, donde incluso llegó a negociar con el PP para concurrir conjuntamente a los comicios del 12M. Las negociaciones saltaron por los aires por el desacuerdo entre la Ejecutiva nacional de Ciudadanos, partidaria de la integración en la lista ‘popular’, y la rama catalana liderada por Carrizosa, negada en redondo a esa posibilidad.
Este desencuentro se llevó por delante al secretario general de Ciudadanos, Adrián Vázquez, que negociaba la inclusión de nombres ‘naranjas’ también en la papeleta de las europeas del 9J. Desde entonces, su cara más visible es precisamente el candidato de las europeas, Jordi Cañas, que también ejerce como portavoz nacional.