De la mano de Nacon y del desarrollador ACE Team nos llega Clash: Artifacts of Chaos. Este título que acaba de salir a la venta es bastante peculiar. Dentro de que es un Soulslike, tiene unos escenarios muy coloridos. Su parte artística con estética cellshading nos ha gustado bastante. Aparte, cuenta con una jugabilidad muy completa. Sin duda, uno de esos juegos que gustarán a los amantes del género.
Tomamos el papel de un personaje con una estética muy peculiar. Es humanoide pero se nos parece más a uno de los protagonistas de Oddworld. Su nombre es Pseudo. Sin mucho por explicar, empezará el juego y el tutorial. Nos van a dar a elegir tres posturas de combate. La postura relámpago con golpes rápidos, la postura de boxeo con golpes mixtos contundentes y rápidos y la lanza, con golpes largos. A partir de aquí te enseñarán los botones de Clash.
Clash: Artifact of Chaos es diferente
Nos enseñarán a esquivar o mezclar los combos. Sin mucha más explicación tendrás que comenzar la aventura. Nos encontramos ante un mundo muy natural donde prima el verde. También los tonos que están en cada parte del juego son bastante saturados. Ese es el encanto artístico de este Clash. Al contrario que la gran mayoría de títulos del género souls, este Clash es bastante colorido y para nada oscuro.
Lo que es más “oscuro” son los diseños de los personajes. Tanto Pseudo, el protagonista, como los enemigos parecen salidos de la mente de un loco. Son animales y una mezcla extraña de elementos. Como decimos, son muy coloridos y realmente, si te gusta el arte surrealista y de colores saturados, te vas a quedar embobado. Y bueno, la particularidad de Pseudo son sus dos modos según día o noche.
Si es de día, Pseudo es un personaje de carne y hueso, extraño, pero con esta textura. Sin embargo, cuando llega la noche, Pseudo pasa a ser un esqueleto de madera. De hecho, el juego lo comienzas así y encuentras tu cuerpo bajo un árbol. En ese momento pasas a ser uno u otro. Así que según quién seas, podrás pasar por algunas zonas o tendrás que esperar a la noche. Por ejemplo, hay unas zarzas que solo se te permitirá atravesarlas cuando en Clash sea de noche.
Ciclos de día y noche con diferencias
Y es que con la carne mortal, resultarías herido y siendo esqueleto de madera, pasas sin ningún rasguño. La narrativa de Clash es bastante interesante y, sin inventar nada, nos engancha. Sin embargo, preferimos no contar nada para evitarte spoilers y sorpresas. Eso sí, hay un enemigo al que deberemos de buscar en este mundo semi abierto. En cuanto a la jugabilidad, admitimos que es satisfactoria y con suficiente profundidad.
Hay ciertos puntos que no están demasiado bien explicados. Por ejemplo un minijuego que se realiza antes de luchar con algunos enemigos. Es un minijuego de dados en donde las normas no están demasiado bien explicadas. Entonces hasta que no coges el punto, no sabrás muy bien qué hacer. También tenemos una parte RPG, vamos a poder conseguir nuevos estilos de combate y aumentar las estadísticas básicas del personaje.
Así que aunque hayamos elegido mal al principio en Clash el estilo de lucha, lo vamos a poder modificar después. E incluso mezclarlos. En este aspecto el título es bastante variado y nos ofrece muchas opciones distintas. Ya tendremos que ver cuál es nuestro estilo de juego para adaptarnos a ello. A lo largo de la aventura iremos descubriendo muchos lugares. EL mapa es amplio y podremos recoger coleccionables. Sin embargo, no tendremos guía de ningún tipo.
Buen sistema de clases
En cuanto al combate, nos ha gustado bastante que cuenta con golpes normales y golpes fuertes. Podemos mezclarlos para hacer combos. También iremos aumentando un medidor que al máximo hará que la cámara pase a primera persona. Esto nos ha encantado en Clash, vivirlo todo desde los ojos de Pseudo. Eso sí, no es un juego sencillo y deberemos fabricar pociones de usos limitados para seguir avanzando. En esto, en los guardados y en la resistencia es como un souls clásico.
Gráficamente no deja indiferente a nadie. No es un juego que pase desapercibido. Los elementos, personajes y enemigos son bastante surrealistas. Parecen sacados de la típica IA generadora de imágenes. Pero juega en todo momento con una naturaleza-Punk. Ya decimos, puedes odiarlo o puedes amarlo, pero no te va a dejar templado. El título viene traducido al español y con voces en inglés.
Clash: Artifact of Chaos es uno de esos Souls diferentes que merece la pena jugar. El combate y la jugabilidad es satisfactoria. Mete mecánicas de día y de noche que cambian el escenario y las posibilidades. Hay puzles, cantidad ingente de enemigos y jefes finales. Tiene algunas cosas originales que hacen que merezca la pena verlo. Y también incluye elementos del género ya clásicos. Si no sabes a que jugar, mientras llega el DLC de cierto juego del género de mundo abierto, puedes darle a esto. Te va a gustar seguro. Y nos llega de la mano de Nacon.