Hacia finales del año pasado, comenzó a conformarse con más fuerza el fenómeno que se ha llamado “La Gran Renuncia”, vinculado al contexto laboral y que parece estar desarrollándose en España más como “La Gran Resignación”, con profesionales faltos de compromiso y motivación con su dedicación profesional.
Fenómenos como estos hacen que las empresas se estén preocupando cada vez más por saber cómo mejorar la motivación de sus empleados y equipos de trabajo, fomentando su bienestar y su capacidad de colaboración para seguir creciendo en resultados de manera estable y sostenible tanto para ellas mismas como para sus profesionales.
Y no es para menos, pues las cifras en que se ampara esta «Gran Renuncia» no son triviales. Según Forbes, en noviembre de 2021 se alcanzó en Estados Unidos un récord en renuncias voluntarias, con 4,5 millones de profesionales que decidían despedirse de su puesto de trabajo. En España, el 54 % de los trabajadores se encuentra descontento con su puesto actual, según la Guía del Mercado Laboral 2022. Los funcionarios mayores de 45 años son los que menos satisfacción registran.
Con estos datos, es imposible no reconocer que el formato laboral y las necesidades de los profesionales han cambiado: el futuro del trabajo se perfila con nuevas características que se deben aprender a integrar en el contexto empresarial.
Conseguir implementar un entorno de bienestar laboral, con las condiciones de seguridad apropiadas, un buen trato humano y un contexto que fomente el desarrollo personal y profesional es clave y, a la vez, un reto para las empresas, especialmente para aquellas con formatos de trabajo híbridos (presencial – remoto).
Como respuesta a estas necesidades de adaptación y evolución de los entornos y habilidades profesionales, Sandra Solís, formadora, coach y consultora experta en bienestar de equipos y desarrollo del talento en empresas, trabaja con organizaciones y escuelas de negocio a través de programas de formación, talleres de equipo y coaching ejecutivo centrados en el desarrollo de habilidades de liderazgo, directivas y de comunicación, en los que vuelca su conocimiento y sus más de 15 años de experiencia liderando equipos y formando parte de comités ejecutivos en empresas multinacionales. La finalidad de estos proyectos que Sandra Solís trabaja con empresas e instituciones formativas y de orientación laboral es conectar el talento de los equipos y profesionales con los objetivos del negocio de las compañías y las demandas del mercado, con practicidad, proactividad y realismo.
¿Cuáles son las técnicas que permiten a las empresas tener equipos autogestionados que funcionan?
La formación en soft skills, el coaching de equipos y el coaching ejecutivo se han convertido en grandes aliados para las empresas y su contribución a generar entornos de alto desempeño y bienestar para sus profesionales. Se trata de aportar nuevos enfoques de trabajo, métodos y herramientas valiosas y prácticas para que las personas construyan su camino de desarrollo profesional en su entorno laboral. La clave es acompañarles en un proceso que examine las necesidades y las condiciones de cada trabajador, que ayude a descubrir cómo evaluar el talento que cada profesional tiene de forma más innata y que aporte conocimientos para ayudarles a desarrollarlo y convertirlo en una verdadera fortaleza que contribuya a la misión de sus equipos o contexto de trabajo, aumentando así la productividad, el rendimiento y el bienestar.
En la actualidad, existen diversos programas y talleres en formatos presenciales, online e híbridos, a los cuales las empresas y escuelas de formación pueden recurrir según sus propósitos y metas corporativas con sus equipos y profesionales. Entre las opciones, se encuentran talleres de teambuilding y talleres de trabajo en equipo: su finalidad es incentivar, mediante dinámicas y actividades el trabajo colaborativo, la creación conjunta de planes de acción que les motive a seguir avanzando y fomente el sentimiento de pertenencia y la autogestión.
Por otro lado, los talleres de innovación y cocreación estratégica son ideales para equipos autogestionados que desean reinventarse y dar una nueva dirección a las acciones estratégicas, pero manteniendo la misión de la empresa.
Las habilidades necesarias para lograr el bienestar laboral
Un elemento importante entre los aspectos a solucionar o mejorar dentro de un equipo corresponde con las competencias o habilidades blandas de los empleados. Estas hacen referencia a las cualidades específicas que cada persona tiene y pone en juego al relacionarse con los demás y al trabajar consigo misma, como la comunicación, la empatía, la creatividad, el liderazgo, la organización, la autogestión, la capacidad de adaptación y la resiliencia. Dichas habilidades se desarrollan con conocimiento, tiempo y dedicación para entrenarlas y son las que consiguen que el trabajador desempeñe su labor profesional con mayor excelencia, logrando con ello incrementar la sensación de bienestar laboral percibido y la generación de la cohesión y adhesión adecuada en los ambientes corporativos.
Sandra Solís Coach, a través de su conocimiento, experiencias y aprendizajes, contribuye a desarrollar el potencial de los profesionales y de los equipos de empresa en esta dirección. Gracias a sus talleres y programas (presenciales u online), la consultora facilita el alineamiento entre el talento de los grupos de profesionales y los objetivos corporativos, logrando así fomentar un ambiente de trabajo más armónico, motivador y efectivo. Además, ofrece conferencias y ponencias con temáticas dedicadas a empresas en transformación y a compañías que quieren elevar el rol directivo de las mujeres.
Mantener a los equipos profesionales motivados y cohesionados es una de las necesidades más importantes de cualquier empresa actual. Un trabajador satisfecho tiene un rendimiento más alto, lo cual se traduce en un mayor nivel de estabilidad financiera para la compañía.