El jurista valenciano Javier Vilalta considera que la sentencia que le ha impuesto el pago de 3.000 euros a su exmujer por «ocultarle» una relación homosexual previa a la boda es «una bofetada a los derechos humanos» y ha anunciado que la recurrirá.
Además, ha decidido iniciar acciones públicas para visibilizar esta situación y hacer «un llamamiento» a los partidos políticos para que se realicen cambios legislativos que impidan que se puedan seguir produciendo lo que califica de «juicios morales».
Vilalta ha realizado estas declaraciones a Europa Press después de que el Juzgado de Primera Instancia número 9 de València haya accedido a la petición realizada por la exesposa de Vilalta –de la que lleva divorciado una década– para que se le conceda la nulidad matrimonial alegando que él le ocultó «deliberadamente» antes de la boda que era homosexual. Asimismo, la sentencia impone al hombre una indemnización de 3.000 euros (1.000 euros por cada año de matrimonio).
El jurista, especializado en Derechos Humanos, ha aseverado que siente «una profunda tristeza e indignación». «Los tribunales tienen que estar para garantizar los derechos constitucionales y humanos y yo me siento vulnerado en mi derecho a la privacidad, la intimidad y audiencia. Me parece indignante que un tribunal pueda calificar mi sexualidad y mis relaciones íntimas y esto abre la puerta a una persecución a las personas no heteronormativas», ha advertido.
Por ello, ha avanzado que, «ahora que se ha visibilizado esta bifobia», ya que la sentencia no recoge la posibilidad de la bisexualidad de Vilalta, interpondrá un recurso e impulsará acciones para promover un cambio legislativo.
Su pretensión, explica, es que se modifique el Código Civil –que es anterior a la Ley del Divorcio, recalca–, en concreto el artículo 73, y la aprobación de una Ley LGTBI que garantice expresamente que «nadie puede ser juzgado por su sexualidad».