Fiscalía de Valladolid ha mantenido este martes su petición de condena de tres años de cárcel para un criador de halcones de Tudela de Duero, A.R, por estafa en concurso con otro delito de falsedad de documento con motivo de la venta de 13 rapaces a un sultán de Dubái por las que percibió 18.300 euros pero que nunca llegaron a su destino.
El juicio ha quedado visto para sentencia en la Audiencia de Valladolid, donde el fiscal y la acusación particular, que se ha adherido finalmente a la petición del acusador público, han solicitado para el encausado la referida pena privativa de libertad, el pago de una multa de 3.600 euros y, en concepto de responsabilidad civil, el abono de los 18.300 euros a comprador de las aves.
A lo largo del juicio, el procesado, cuyo letrado ha solicitado un fallo absolutorio, ha reconocido que en marzo de 2016 un representante de un sultán de Dubái se puso en contacto con él, propietario de un centro de cría de halcones en Tudela de Duero, y cerró la venta de un total de 13 aves, seis hembras y siete machos, con destino a Emiratos Árabes por las que percibió en total 18.300 euros.
Aunque las rapaces nunca llegaron a su destino, el criador, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha explicado que la operación quedó finalmente truncada cuando el intermediario del sultán, Faisal M, comenzó a renegociar a la baja la adquisición de las aves y también por las discrepancias sobre quién tendría que costear los cerca de 6.000 euros que suponía el porte de la ‘mercancía’ hasta Emiratos Árabes.
El acusado mantiene que la falta de acuerdo hizo que pasaran los meses y que la temporada de exportación estuviera ya muy avanzada, con lo que se vio obligado a dar salida a las aves para evitar que éstas se echaran a perder en el criadero y para reducir los costes de mantenimiento, de ahí que parte de ellas se las regalara a un amigo cetrero y otras las vendiera en el mercado local para cubrir gastos.
TREINTA AÑOS CRIANDO HALCONES
«Llevo treinta años trabajando en este negocio y jamás he tenido un problema con nadie», ha sostenido A.R, quien, secundado por su esposa en calidad de testigo, ha asegurado que incluso se puso en contacto directo con el sultán y éste le respondió que se trataba de un negocio de Faisal. «Al final, se pasaban la pelota entre ellos», ha denunciado el criador de halcones, cuya esposa ha añadido que no entregaron los 18.300 euros al comprador «porque nunca los reclamó».
Varios testigos, amigos del acusado, a los que regaló varios halcones han testificado que las aves las recibieron sin coste alguno porque, según les dijo entonces A.R, tenían que darles salida después de que hubiera cerrado una operación de venta «con un señor de Emiratos Árabes y éste no diera señales de vida durante dos meses».
Además del delito de estafa, el criador está acusado de un delito de falsedad documental por haber presentado una factura falsa por la compra de los halcones en contestación a la demanda que Faisal promovió en un procedimiento civil en el Juzgado de Primera Instancia 14 de Valladolid. En dicha factura, según determinó un perito calígrafo, A.R. modificó los números del precio e incluyó conceptos no acordados.
La demanda fue estimada y el juzgador declaró resuelto el contrato de compraventa y condenó al criador a pagar a Faisal los 18.300 euros, al tiempo que dedujo testimonio contra él por presentar un documento falso en un procedimiento civil.