Recién llegada de unas vacaciones de ensueño recorriendo México y disfrutando de la gastronomía del país azteca con su marido, Dabiz Muñoz, Cristina Pedroche se ha visto de nuevo envuelta en la polémica.
El motivo, unas imágenes que la presentadora compartió en Instagram junto a unas niñas en situación de vulnerabilidad confesando que le habían «enseñado mucho», lo que ha desatado fuertes críticas contra la vallecana, a la que han acusado de intentar ganar seguidores y favorecer su imagen haciendo demagogia de la pobreza.
Harta de los ataques de sus haters, Pedroche ha decidido hacer oídos sordos y desactivar los comentarios de dicha publicación, dejando claro que prefiere no enterarse de lo que la gente piensa de su fotografía.
Sin embargo, las críticas no parecen haber hecho mella en la comunicadora que, dispuesta a seguir dando que hablar ha comenzado la semana compartiendo una imagen «muy de lunes». Un sugerente posado completamente desnuda en una piscina, subiendo la temperatura y presumiendo de su espectacular figura. Eso sí, muy ‘recatada’ – y esquivando así la censura de Instagram – Cristina posa de espaldas con una sonrisa traviesa y tan solo el reflejo del agua nos permite adivinar la parte de su anatomía donde la espalda pierde su nombre.