Los Mossos d’Esquadra han detenido a tres hombres y a una mujer multirreincidentes por el robo de cable de cobre en la línea de tren Barcelona – Montcada i Reixac (Barcelona) que paralizó Rodalies durante las elecciones en Cataluña este 12 de mayo.
En un comunicado este viernes han explicado que, a raíz de estos hechos, la policía catalana activó efectivos de Policía Científica para hacer inspecciones oculares.
La Unidad Central de Incendios Estructurales descartó que se tratara de un sabotaje, y la principal línea de los investigadores de la División de Investigación Criminal (DIC) fue que se encontraban «ante un grupo criminal especializado en robos de cable de cobre».
20 ANTECEDENTES
Los detenidos acumulan unos 20 antecedentes por hechos similares, y los Mossos d’Esquadra creen que han participado en seis hechos vinculados con el robo de cobre en las líneas ferroviarias de la demarcación de Barcelona entre el 1 de mayo y el 22 de mayo.
Entre los detenidos hay el propietario de una empresa gestora de residuos, que también está presuntamente relacionado con el grupo criminal, ya que presuntamente actuaba con connivencia con los detenidos a la hora de recibir el material sustraído, por lo que se le imputa un delito continuado de receptación.
Un hombre y la mujer fueron detenidos en Esparreguera (Barcelona) por vigilantes de seguridad privada de Ferrocarrils de la Generalitat de Cataluña y por la Policía Local del municipio, después de que se produjera un corte eléctrico con afectación a la circulación ferroviaria.
Los otros dos investigados quedaron detenidos este jueves, uno en Santa Perpètua de Mogoda y el otro en Sabadell (Barcelona).
Durante la investigación, los agentes detectaron que los detenidos «se dirigían siempre al propio gestor de metales», y que el propietario de esta empresa se negó en dos ocasiones a las inspecciones de los Mossos d’Esquadra, por lo que quedó sancionado por incumplimiento de la normativa.
ROLES DETENIDOS
Los detenidos «mantenían una relación constante con esta empresa gestora de residuos en la que colocaban el material sustraído», y los arrestados tenían roles distintos para actuar.
Uno de los hombres y la mujer, de 52 y 24 años, se encargaban de cometer las sustracciones; un tercero, de 26 años, hacía funciones ejecutivas –era el titular de los vehículos investigados y se encargaba de los tratos relativos a la receptación del material sustraído–, y el cuarto era el propietario de la empresa gestora de residuos, donde los detenidos colocaban el material sustraído.
Los agentes han comprobado que se desplazaban en una furgoneta y un vehículo; cargaban el cobre sustraído en el primer vehículo; utilizaban dos pértigas para descolgar el cable de la catenaria, y lo cortaban con una radial.
