El cineasta David Trueba, que debuta como director teatral desde este miércoles 24 de abril en el María Guerrero con la obra ‘Los guapos’, ha condenado la violencia sexual en el sector y considera que ya es «hora» de que vayan saliendo a la luz casos como el de la semana pasada con el dramaturgo Ramón Paso.
«De este hombre (Ramón Paso) no conozco más que por la prensa, no le conozco a él ni nunca he coincidido, pero tengo una sensación desde que todo esto empezó -no este caso, sino otros muchos-, de que ya era hora», ha afirmado el cineasta durante la presentación de la obra teatral.
Trueba ha explicado esta situación desde su experiencia personal, con una familia de siete hermanos varones y una hermana mujer. «Esos protocolos que ahora se consideran tan importantes los estableció de una manera increíblemente inteligente mi madre y ahora con el tiempo me he dado cuenta de lo importante que fue», ha celebrado.
En este sentido, ha remarcado la importancia de crear «un espacio propio» para las mujeres en cualquier situación, puesto que la primera función de la justicia es «la seguridad». En su caso, dentro del cine y el teatro, también ha recordado que ha sido pareja de una actriz, amigo de muchas otras actrices y es padre de otra actriz, por lo que siempre ha estado atento a estas situaciones.
«Conozco perfectamente el comportamiento que pueden llegar a tener algunas personas en esos niveles», ha apuntado, para luego instar a denunciarlo -«o incluso expresar lo que se ha vivido»- y que esas mujeres reciban «muchas ayudas», porque a veces «se está muy solo y se paga un alto precio» por esa denuncia.
Trueba ha recordado cómo cuando estalló el ‘metoo’ con el caso de Harvey Weinstein, coincidió en un tren con la actriz Nuria Espert, a quien preguntó respecto a su experiencia con estos casos. «Me contó dos o tres episodios y fueron suficientes para entender que esto le puede pasar a cualquiera y especialmente a las mujeres jóvenes», ha lamentado.
De hecho, Trueba cree que la precariedad y la juventud en un sector como el actoral son factores que se pueden utilizar «contra uno» en situaciones jerárquicas. «Vamos a intentar también no volvernos locos, ser justos y darle el tratamiento que necesitan las cosas, pero sobre todo intentar educar a las generaciones a que lo que pasaba no suceda», ha defendido.
En ‘Los guapos’, dos personajes encarnan dos distintas versiones del destino -Pablo y Nuria, interpretados por Vito Sanz y Anna Alarcón, respectivamente-. Ambos crecieron en el mismo barrio, pero sus vidas han evolucionado de modo muy distinto. Trueba ha definido esta primera experiencia en la dirección en el teatro como algo «inevitable».
¿UN FUTURO EN EL TEATRO?
No obstante, pese a haber disfrutado, no ha cerrado las puertas a seguir trabajando en sus películas, aunque matizando que cree que «sucederá» una nueva llamada para las tablas. «La producción, el dinero o el azar son cosas que muchas veces no dependen de ti», ha indicado Trueba remarcando que no toma las decisiones por él solo.
«Si el teatro me llama o me ofrece una casa o una posibilidad de volver a intentarlo, me encantará. Y si consigo escribir otra función, seré feliz», ha defendido. El director de ‘Saben aquell’ ha reconocido «tener la suerte de disfrutar» de dos profesiones en las que la narración es lo importante. «A mí lo que me gusta es narrar», ha añadido.
Además, ha recordado que no ha tenido «experiencias ajenas» al teatro, puesto que familiares y amigos ya habían trabajado en el medio. «Conozco las experiencias consolando de una mala crítica, sabía todas las posibilidades que se pueden dar y si hubiera tenido una cagada tendría más delito», ha concluido.