El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene previsto anunciar este martes durante su primera intervención en el Debate sobre el estado de la Nación “medidas muy potentes y ambiciosas” que reforzarán al conjunto de la coalición y darán “profundidad a la legislatura”, dejando claro que queda todavía «año y medio» de mandato.
Así lo trasladan fuentes de La Moncloa horas antes de que comience la 26 celebración de un Debate sobre el estado de la Nación en democracia en el que Sánchez hará repaso de su gestión al frente del Ejecutivo, sobre «lo que estamos haciendo en este momento y, sobre todo, lo que vamos a hacer».
La comparecencia se produce en un momento de tensión entre los socios del Gobierno y cuando aún no hay fecha para la reunión de la comisión de seguimiento del acuerdo de coalición demandada desde Unidas Podemos para zanjar las últimas diferencias con el PSOE, principalmente a cuenta del incremento del gasto en Defensa.
En este contexto, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, considera que debe producirse una reunión con Sánchez para desencallar la situación.
En La Moncloa no ven por ahora hueco para esa cita, pero aseguran que las medidas que avance el presidente van a “contentar” al Gobierno en su conjunto, además de a las clases medias y trabajadoras. Prueba de ello es que se muestran seguros de que después del debate el Ejecutivo saldrá «más fuerte».
Las fuentes consultadas indican que esas medidas demostrarán que el Ejecutivo es “consciente” del momento que se vive y de ahí que algunas sean iniciativas “coyunturales”, pero también se den a conocer otras “estructurales”, aunque no despejan si serán en materia fiscal.
El Gobierno defiende que el debate será “muy importante” no sólo por el momento, sino porque vuelve así la normalización institucional, ya que se recupera una práctica parlamentaria que no se producía desde 2015.
Recuerdan que bajo mandato de Sánchez (2018) no se ha realizado por la sucesión de elecciones y por la pandemia. Aunque apuntan que ha comparecido hasta en 18 ocasiones en el Pleno como presidente.
Durante el debate, el jefe del Ejecutivo ofrecerá a la oposición, especialmente a los socios parlamentarios, la hoja de ruta sobre la que quiere transitar en lo que resta de legislatura y en la que, según algunas fuentes, se continuará con la senda de reformas aunque con menos impulso legislativo.
En su actuación, Sánchez buscará confrontar el modelo socialdemócrata que, a su juicio, representa y que supone la protección de la mayoría social durante la pandemia y ahora con la guerra frente al que representa, dicen, un Partido Popular que “recortó y dejó a la gente a su suerte”.
Se trata, ahondan, de conjugar la transformación del país, en modernización y ampliación de derechos, con la protección de la clase media y trabajadora sin olvidar a los colectivos más vulnerables.
En un momento en el que las encuestas reflejan un Partido Popular en auge desde que Alberto Núñez Feijóo asumió el liderazgo, en La Moncloa indican que con el debate se va a elevar el perfil institucional mientras enfrente el líder del PP no podrá intervenir y sólo “se va a sentar” al lado de la portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra.
De aquel debate de hace siete años, Sánchez es el único líder de un partido político que volverá a participar en esta sesión parlamentaria, aunque entonces lo hizo como responsable del principal partido de la oposición.