Mario Casas y Desiré Cordero se convirtieron en una de las parejas estrella de verano de 2021. Guapos, carismáticos, en la cima de sus respectivas carreras… A pesar de ser pillados en actitud cariñosa y apasionada, el actor y la modelo intentaban mantener su relación al margen del foco mediático y, a pesar de no esconderse, evitaban dejarse ver juntos y hablar públicamente de una historia de amor que parecía consolidarse a pasos agigantados.
Sin embargo, los rumores de ruptura se desataron después de que la pareja pasase la Navidad por separado, él con su familia en Canarias, y ella en su Sevilla natal. Unos rumores que la propia Desiré se encargó de confirmar a través de sus redes sociales a principios de enero, confesando a sus seguidores que al 2022 le pedía «Alguien que me quiera y se quede conmigo… Amor ¿y tú?».
Una frase que ahora toma un especial significado, ya que además de dejar claro que lo suyo con Mario Casas era agua pasada, revelaba el inicio de su nueva relación con la persona a la que le decía esas palabras y a la que llamaba «amor», aunque en su momento pasó desapercibido: el italiano Simone Susinna.
Un guapísimo actor y modelo de 28 años que se ha convertido en todo un fenómeno en el país transalpino – donde le conocen como ‘el hombre de la mirada de hielo’ por sus impresionantes ojos azules – y con el que Desiré ha sido pillada disfrutando de un tranquilo paseo romántico por Milán en el que no faltaron ni las miradas cómplices ni los gestos de cariño.
Simone Susinna, que se encuentra inmerso en el rodaje de la pelócula de Netflix 365 DNI 2, saltó a la fama en el año 2017 como concursante de la edición italiana de ‘Supervivientes’, aunque antes había conquistado las pasarelas por su impresionante físico, desfilando para diseñadores de la talla de Dolce & Gabbana o Armani.
Según desvela ‘El Español’, Desiré y Simone están enamorados y acaban de pasar unos días en Milán, donde se les vio derrochando amor y complicidad por el centro de la ciudad. Sin duda, un inicio de año por todo lo alto para la sevillana, que ya ha olvidado a Mario Casas de la mano del espectacular italiano, ‘culpable’ de la felicidad que desprende la modelo en los últimos días.