Agentes de la Policía Local de Sevilla, adscritos al Área de Gobernación y Fiestas Mayores, han detenido a un hombre de 43 años de edad como presunto autor de la amenaza de muerte a su mujer horas después de haber sido puesto en libertad con una orden de alejamiento dictada por un Juzgado de Violencia de Género por los mismos motivos.
Los hechos sucedieron pasadas las 23,00 horas de este lunes cuando desde el centro de control 092 se envió una patrulla a la zona este de la capital donde, presuntamente, un varón había amenazado de muerte a su pareja, informa el Ayuntamiento en un comunicado.
Los agentes contactaron con una mujer de 43 años que se presentaba «muy alterada y acompañada de sus dos hijas menores». En su declaración confirmó que el día anterior había denunciado a su marido a la Policía Nacional y que había quedado detenido. Explicó que el Juzgado de Violencia notificó a las dos partes una orden de alejamiento de más de 300 metros tras la que fue puesto en libertad.
Momentos después, cuando la víctima caminaba por la calle con una testigo del juicio, el varón «se dirigió hacia ella a la carrera, insultándola y amenazándola de muerte en presencia de esta testigo y de sus dos hijas menores», por lo que salió corriendo y se refugió entre dos vehículos, desde donde consiguió llamar a la Policía Local.
Ante esta declaración, los agentes se dirigieron al domicilio donde se encontraron al presunto autor de los hechos en el portal. En su declaración, el varón afirmó que había ido a pesar de la orden de alejamiento para sacar al perro, por lo procedieron a su detención y traslado a dependencias policiales donde quedó a disposición judicial.
La mujer rehusó asistencia médica aduciendo que quería quedarse en el domicilio a cargo de los menores, por lo que fue informada por el protocolo de víctimas de violencia de género.
El delegado de Gobernación y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Carlos Cabrera, ha agradecido la labor de las agentes y ha pedido a las víctimas «que denuncien, que no demos ni un paso atrás ante cualquier actitud porque las mujeres no están solas ante sus agresores, y que cuentan con el respaldo de todos los recursos destinados a su defensa y apoyo», como es el caso del teléfono de atención a las víctimas 016, que no deja huella en la factura telefónica, o de los centros municipales de atención integral a la mujer.