El Ballet Nacional de España, dirigido por Rubén Olmo, ha impartido una clase de danza a un grupo de personas pertenecientes a la Asociación Párkinson Móstoles (Madrid) y a APARKAM con el fin de visibilizar enfermedad neurodegenerativa y colaborar con el programa ‘Danza para el Párkinson’.
Según ha informado la institución, el programa ‘Danza para el Párkinson’, desarrollado en 25 países desde hace 20 años, defiende que la danza ayuda a las personas que sufren Párkinson a desarrollar progresivamente habilidades motoras, como la flexibilidad, la resistencia y el equilibrio, a la que vez que es una actividad estimulante para su mente y que les ayuda a crear conexiones sociales.
«Me ha emocionado ver cómo estas personas con párkinson querían ser fuertes y seguir los pasos a pesar de ser un gran esfuerzo para ellos», ha asegurado Olmo, quien añade que los beneficios que la danza aporta a estas personas es que les permite controlar sus movimientos, sentirse más libres y más felices. «La danza da paz a su vida», ha señalado.
El director, junto con la primera bailarina de la compañía, Inmaculada Salomón, y el bailarín del Ballet Nacional de España, Alfredo Mérida, han mostrado los pasos coreográficos creados por Salomón a los participantes de esta iniciativa, organizada con motivo del Día Mundial del Párkinson, que se celebra cada año el 11 de abril. Además, estuvieron acompañados por las profesoras de la Asociación de Profesionales de la Danza en la Comunidad de Madrid (APDCM) Guillermina de Bedoya, Paloma Alfonsel y Concha Mora, también impulsoras de este programa.
«La danza nos ayuda a no quedarnos parados», ha comentado uno de los participantes con párkinson como una de las razones por las que realiza esta actividad regularmente, y ha agregado que después de cada sesión «sales diferente»: «Te quita las penas y te da ganas de vivir», ha reflexionado.
Por otro lado, para el presidente de la APDCM, César Casares, la danza «no es solo un entretenimiento». «Es un aporte esencial para el bienestar social e individual», ha matizado. Finalmente, Inmaculada Salomón ha comentado: «Estoy muy orgullosa de que lo que hago cada día pueda ayudar a otras personas».