El FC Barcelona asaltó el Cívitas Metropolitano este domingo con sendos buenos goles de Joao Félix y Robert Lewandowski más la sentencia de Fermín (0-3), para imponer su buen momento sobre un Atlético de Madrid que pagó la resaca europea y que perdió por primera vez en casa en LaLiga EA Sports.
Con ambos equipos en racha, con el agradable regusto del pase a cuartos de final de la Liga de Campeones, el conjunto rojiblanco desaprovechó un inicio superior. El Barça, con Xavi Hernández expulsado fruto de la tensión y mala pinta que tenía el partido, encontró pegada y a un Lewandowski inspirado para colocarse segundo.
Los catalanes asumieron el papel de principal perseguidor del líder Real Madrid, a ocho puntos, mientras el Atlético cayó a la quinta posición, fuera de la zona de Champions en la tabla. Joao Félix, que apenas había tocado el balón, hizo el 0-1 en el minuto 38. El jugador cedido por el Atlético de nuevo castigó a su equipo, como en la ida, y dio fe a un Barça superado hasta entonces.
A Xavi se le cayó el plan antes de empezar con la lesión de Andreas Christensen, su gran invento en el centro del campo. Sin el danés, Ilkay Gündogan alejó su posición de la portería rival y los visitantes apenas conectaron con su gente de arriba. La presión rojiblanca asfixió a su rival y, en la recuperación, los de Diego Pablo Simeone perdonaron, la primera de Pablo Barrios.
Rondó la meta azulgrana el Atlético pero no concretó arriba, mientras el Barça, aunque con dificultad, fue dando pasos adelante. La intensidad local bajó pasada la media hora, cuando los de Xavi empezaron a encontrar pases por dentro a Fermín y, más adelante, a Félix y Lewandowski. El polaco fue quien conectó con Gündogan para dar la asistencia de gol al portugués en su regreso a casa.
El Barça apretó entonces, Xavi fue expulsado reclamando una falta en la presión de los suyos y Álvaro Morata tuvo la última del primer tiempo. Con la reanudación, Simeone metió a Griezmann y Memphis, las balas que se había guardado después del desgaste contra el Inter, pero el regreso de vestuarios fue una losa para los locales.
Rodrigo de Paul, que pudo ser expulsado en la primera jugada contra Sergi Roberto, regaló el balón en la segunda y Raphinha se la puso a un Lewandowski que definió como en sus mejores tiempos (0-2). El partido se le puso muy de cara a los catalanes, con un Atleti obligado a irse arriba, y que pudo meterse en la pelea si no es por un Ter Stegen gigante ante Marcos Llorente.
El meta alemán, que paró también el rechace de Memphis aunque estaba en fuera de juego, ayudó además a la salida de balón, dejando incluso sólo ante Oblak a su ‘9’. El Atlético no tuvo la frescura mental ni física, aunque fue dando entrada a titulares, para luchar ante la adversidad que creció con el 0-3 de Fermín, a la contra el Barça con otra asistencia de Lewandowski. En la última, Nahuel Molina fue expulsado por tirar a Vitor Roque en boca de gol.
Los de Xavi, con su equipo viento en popa desde que dijo que se iría en junio, demostraron tener tomada la medida a un campo inexpugnable en Liga desde que precisamente el Barça venciese la pasada temporada. Un cuadro azulgrana que encaja mucho menos y con pegada para no rendirse en Liga y ganar confianza para el cruce con el PSG, mientras los rojiblancos se ven a un punto del cuarto puesto, fallando donde no suele tras el subidón contra el Inter.