El crimen de la localidad guipuzcoana de Orio, un supuesto caso de violencia de género que ha causado la muerte de una mujer y de su expareja, podría haberse cometido con una escopeta de cañones recortados, según han informado a Europa Press fuentes de la investigación.
Los hechos han sucedido sobre las cinco y media de este martes por la tarde en la calle Arrantzale de Orio, junto a un parque, cuando se ha escuchado una especie de deflagración, y han aparecido una mujer y un hombre muertos. La fallecida se encontraba sentada en un banco, mientras que el hombre estaba a sus pies, tumbado en la acera.
Aunque en un principio se barajó la hipótesis de que la muerte de ambos se hubiera producido por un artefacto explosivo casero, camuflado dentro de una caja, finalmente cobra fuerza la hipótesis de que el crimen se haya cometido con una escopeta de cañones recortados, arma que ha sido localizada en el lugar.
Todo apunta a que el hombre ha matado a la mujer y el también ha muerto en el incidente. Agentes de la Ertzaintza, que se encargan de la investigación, han procedido al registro del vehículo y la vivienda del presunto homicida.