El estudio científico del sepulcro de Santa Teresa de Jesús que se venera en Alba de Tormes (Salamanca) y que ha comenzado en el mes de agosto del pasado año, permitirá su reconstrucción facial. En concreto, el proyecto se está llevando a cabo en el Victorian Institute of Forensic Medicine (Monash University, Victoria, Australia) y aplica una combinación de metodologías forenses actualmente en uso en Estados Unidos y Reino Unido basándose en datos antropométricos e imágenes radiográficas.
Según ha informado la Orden del Carmelo Descalzo en un comunicado recogido por Europa Press esta técnica permitirá disponer próximamente de la imagen en versión digital y por medio de scanner tridimensional en imagen de bulto, que permitirá contemplar, con la mayor proximidad posible y con sus mismas proporciones, la fisonomía original de Santa Teresa de Jesús. Según el profesor Luigi Capasso, que dirige el reconocimiento canónico en Alba de Tormes, «se aprecia un rostro sereno y apacible en Santa Teresa de Jesús.
Es el rostro de una persona que manifiesta gran serenidad». El perfil antropométrico de la Santa corresponde tanto a sus imágenes existentes como a las descripciones históricas y a la reconstrucción facial realizada con motivo de este reconocimiento.
«Se está ultimando en Australia, por encargo de la Orden del Carmelo Descalzo la reconstrucción del rostro de Santa Teresa de Jesús con sus mismas proporciones, teniendo en cuenta las pruebas obtenidas en Alba de Tormes y consistentes en fotografías, radiografías, proporciones y medidas, además de la redacción literaria realizada por la madre María de San José, carmelita descalza contemporánea de la Santa», ha detallado el prior de Alba de Tormes, Miguel Ángel González.
Con respecto al estudio del sepulcro de Santa Teresa de Jesús, la Orden del Carmelo Descalzo ha recordado que está dirigido por el antropólogo italiano Luigi Capasso, quien ha realizado cerca de cuarenta proyectos semejantes, en colaboración de los también antropólogos italianos de la universidad «G. D’Annunzio» de Chieti – Pescara» Ruggero D’Anastasio y el doctor Iacopo Cilli.
«Con este trabajo se reconstruye la parte de la historia que guarda la biología de la persona de Santa Teresa de Jesús. En el caso de la Santa se trata de una historia absolutamente extraordinaria», ha indicado el profesor Capasso. Como ejemplo, el profesor Capasso, ha señalado que en los pies de la Santa se aprecian las señales de las cuerdas de esparto clásicas de las alpargatas teresianas al igual que la marca de la toca carmelitana en su frente.
Por otra parte, a la espera de los resultados definitivos y teniendo en cuenta las novedades descubiertas sobre la santa andariega el pasado mes de agosto, se ha comprobado que, además de la cifosis vertebral, su cuerpo se fue inclinando ligeramente hacia el lado derecho con el paso del tiempo, probablemente como consecuencia de la postura prolongada en su labor de escritora.
Para esta tercera fase del estudio, los especialistas italianos y el padre postulador general de los carmelitas descalzos, Marco Chiessa, han colocado el cuerpo de la Santa en una urna provisional adecuadamente preparada para asegurar su conservación en la capilla de la clausura del monasterio mientras se realizan los trabajos de restauración y adecuación de la urna de plata destinada a seguir custodiando el cuerpo de la Santa mientras se realizan los trabajos de preparación del sepulcro teresiano en la Basílica de la Anunciación.
Durante este tiempo en que el cuerpo de la Santa se encuentra en la clausura del monasterio, se realizará un estudio científico – artístico de la urna de plata y la restauración de la misma, así como un estudio de su hábito; también se procederá a la restauración del relicario del santo brazo; se prepararán los lugares de veneración de las reliquias mayores del corazón y del brazo de Santa Teresa de Jesús; se acondicionará el sepulcro para una mejor veneración del mismo y se restaurará el relicario del corazón de Santa Teresa de Jesús.
El próximo domingo 23 de febrero en el camarín del sepulcro de Santa Teresa de Jesús, además de ver su sepulcro vacío, se podrá ver la urna de plata de mediados del siglo XVIII, obsequio de los reyes de España Fernando VII de Borbón y Saboya y Bárbara de Braganza y Habsburgo, reina que tenía desde el bautismo el nombre de Teresa entre sus varios nombres.
Dicha urna funeraria es una magnífica obra maestra de orfebrería realizada en Orleans (Francia) y permanecerá en el camarín alto desde el domingo 23 de febrero hasta el domingo 2 de marzo; posteriormente será objeto de estudio por parte del profesor de la Universidad de Salamanca Manuel Pérez Hernández, además de ser objeto de restauración. El padre carmelita descalzo Ricardo Plaza se ha trasladado a Alba de Tormes desde Toledo y ha sido el encargado de sacar la reliquia del brazo de la Santa para poder proceder a la restauración del relicario.
La urna de plata y el relicario del brazo han quedado vacíos con el fin de ser restaurados, encargándose de ello el padre Ricardo Plaza, carmelita descalzo y restaurador. Finalmente se colocará el cuerpo de la Santa en la urna de plata para su veneración pública antes de su colocación definitiva en su sepulcro en la Basílica de la Anunciación de Nuestra Señora del Carmen en Alba de Tormes, en fechas que se determinarán próximamente.