El Cristo Redentor de Río de Janeiro, en Brasil , fue alcanzado por un potente rayo en medio de una tormenta eléctrica y el fotógrafo Fernando Braga fue quien capturó para la eternidad la impresionante imagen.
Según el profesional, el hecho ocurrió el pasado viernes 10 de febrero, entre las 6:55 p.m. y las 7:03 p.m.
La imagen del Cristo Redentor deja ver cómo el rayo le pega en la cabeza a la escultura de 38 metros de altura.
Según el fotógrafo, fueron “muchos y muchos intentos frustrados de atrapar el rayo cayendo sobre Cristo. Mucha lluvia y días. Estuvo cerca varias veces, pero nunca llegó al Cristo. Y luego cae en él, ¡me encanta fotografiar! Ya tengo una foto muy especial para mí, que fue la bendita Luna. ¡Ahora ese es el rayo divino!”.
“Hay un video de dos rayos hoy en Cristo Redentor y su vecino, la Antena de Sumaré”, agregó.
El fotógrafo contó en sus redes sociales que, “después de unas tres horas con la máquina tomando una serie de más de 500 fotos de larga exposición, por fin apareció esta tan esperada foto”.
“En muchos otros (incontables) días y momentos hice lo mismo y nada. Pero eso es lo que es. Es parte de ello y siempre tenemos que seguir adelante intentándolo. Es así en todo. Rendirse, nunca”, afirmó Braga.
El fotógrafo no solo compartió la foto del rayo impactando el Cristo Redentor, sino un video de la secuencia de las tres horas que estuvo aguardando por ese momento.
“Esta parte de la captura (que comenzó incluso antes) fue procesada en poco más de 500 fotos, incluyendo el cambio de la lente que mencioné en el post inicial para capturar mejor la Antena de Sumaré”, recalcó.
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El fotógrafo del Cristo Redentor comentó que la cámara que usó, “o mejor esta máquina de guerra, es de mi padre. Lo tomé prestado hace un año y nunca lo devolví”.
Según el medio Página 12 , tras conocerse la imagen del rayo, la Iglesia Católica, que administra el monumento, envió un equipo para inspeccionar el Cristo Redentor.
En el monumento hay varios pararrayos instalados sobre la cabeza y el brazo de Cristo para absorber los impactos de rayos y evitar riesgos para los visitantes y daños al monumento y al santuario.
