La segunda semana de enero arranca con una tregua en el tiempo invernal, ya que se darán temperaturas más suaves y las heladas se limitarán prácticamente al área de Pirineos, después de que los registros bajo cero hayan sido protagonistas durante varios días en numerosos puntos del país.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) destaca en su predicción para este lunes precipitaciones “abundantes y persistentes” en Pirineos y el extremo oriental del área cantábrica e intervalos de viento fuerte en Baleares y el tercio oriental peninsular.
“Las temperaturas subirán en general, aunque pueden descender algo en el noroeste peninsular, noreste de Cataluña y Canarias y los archipiélagos. Las heladas, débiles, quedarán restringidas a Pirineos”, explica la predicción.
En concreto, en el Cantábrico oriental y Pirineos, el cielo estará nuboso o cubierto con esas precipitaciones abundantes y persistentes, y en el resto de la mitad norte peninsular y en el este de Baleares, también habrá cielos nubosos, con precipitaciones débiles en Menorca y, con tendencia a remitir, en Galicia y el Cantábrico occidental.
No se descartan lluvias en forma débil y dispersa en el entorno de los sistemas central e Ibérico y en Mallorca. Dominarán los cielos poco nubosos en el resto, aunque con abundantes nubes bajas hasta mediodía en buena parte del interior peninsular y probabilidad de nieblas matinales en la meseta Sur. En Canarias se prevé abundante nubosidad media y alta, con probabilidad de calimas.
En cuanto a la cota de nieve, en el Pirineo descenderá a lo largo del día de los 1.800/2.000 metros a 1.000/1.400 metros en el Pirineo oriental y a 1.500/1.800 en el occidental.
Finalmente, se sentirán vientos del noroeste o norte en la Península y Baleares, “fuertes o con intervalos de fuerte” en Baleares y el tercio oriental peninsular, y habrá viento de poniente en el área de Alborán y del sureste en Canarias, que irá tendiendo a amainar.