El titular del Juzgado de Instrucción Número 13 de Madrid escuchará este miércoles al expresidente del FC Barcelona Sandro Rosell en el marco de la investigación que sigue por la denominada ‘Operación Cataluña’ tras haber admitido la querella que presentó el propio empresario contra el comisario jubilado José Manuel Villarejo y varios policías por presuntos delitos de organización criminal, falsedad documental, acusación y denuncia falsa, malversación de caudales públicos y detenciones ilegales.
Fuentes jurídicas han confirmado a Europa Press que el juez Hermenegildo Barrera ha citado a Rosell para que declare sobre los hechos que recoge en la querella que presentó a principios de año y que fue admitida el pasado 15 de febrero.
En la querella de Rosell, a la que tuvo acceso esta agencia de noticias, se apunta a que el comisario Villarejo, el inspector jefe de la UDEF Alberto Estévez, el antiguo inspector del Cuerpo Nacional de Policía Antonio Giménez Raso y el agregado del FBI en la Embajada de Estados Unidos en Madrid Marc L. Varri estarían implicados en la emisión y presentación de informes policiales «mendaces» que tuvieron como destinatario el Juzgado Central de Instrucción que acordó la prisión provisional del empresario catalán durante dos años.
El equipo legal de Rosell indica en la querella que –según recoge la prensa durante los últimos meses a partir de 2012 coincidiendo con el auge del movimiento independentista catalán– «varios mandos del Cuerpo Nacional de Policía, miembros del Gobierno español y dirigentes del Partido Popular, entonces gobernante, con la inestimable ayuda de determinados periodistas y medios de comunicación, se concertaron para elaborar un plan contra dicho movimiento político, al que suele hacerse referencia con el nombre de ‘Operación Cataluña'».
ROSELL SE DICE PERJUDICADO
Los abogados del empresario señalan que dicha operación trataba fundamentalmente de «obtener información y confeccionar pruebas falsas que sirvieran para intimidar, investigar, imputar, perjudicar y desprestigiar a personas que, de una u otra manera, fuera cierto o no, se consideraban cercanas al citado movimiento –independentista–, ya se tratara de cargos políticos, personajes públicos, líderes sociales o empresarios».
Según la querella, entre esas personas estaba Rosell, que entre 2010 y 2014 fue presidente del FC Barcelona. El equipo jurídico incide en que aunque el empresario no ejercía en 2012 ningún cargo público, ni militaba tampoco en ningún partido político, «algunos de los responsables de la citada trama político-policial le consideraban, al parecer, vinculado con el independentismo», lo que le puso «en el punto de mira de dicho entramado delictivo».
Las fuentes jurídicas consultadas han asegurado que aún no hay fecha prevista para tomar declaración a Villarejo o a ninguno de los señalados por el expresidente del equipo blaugrana.