El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha afirmado que, «hoy por hoy», no hay un sí del PNV a la investidura del líder del PSOE, Pedro Sánchez, cuya negociación todavía no ha comenzado. Por otra parte, ha admitido que su relación con el presidente del Gobierno en funciones podría ser «mejor»
En una entrevista al programa «La Kapital» de Telebilbao, recogida por Europa Press, se ha referido al proceso de investidura del próximo presidente del Ejecutivo.
Urkullu ha indicado, como miembro del PNV, que su partido no va a apoyar a Alberto Núñez Feijóo, con quien mantuvo una conversación telefónica que fue «cordial y franca». También ha indicado que fue «provechosa» para saber «cada uno dónde está» y también porque existe diálogo», son «capaces de hablar» y porque, «quizá, en el futuro el escenario de convivencia y de construcción social sea otro diferente» al actual.
Tras recordar que rechazan, en este momento, el apoyo a Feijóo porque «va a tener que estar dependiendo de Vox, sí o sí», ya que es «la opción que ha buscado el PP en determinadas comunidades», ha indicado que, vista la posición del resto de formaciones políticas, a los populares «no les queda más opción que relacionarse» con la formación de Santiago Abascal.
El Lehendakari ha recordado la postura de Vox contra el Concierto Económico, el autogobierno vasco, el idioma o las señas de identidad del autogobierno. «Ni querrían tener ni Parlamento vasco ni Ertzaintza ni Osakidetza», ha advertido.
PEDRO SÁNCHEZ
En relación a Pedro Sánchez, ha afirmado desconocer si habrá investidura del líder del PSOE como presidente del Gobierno porque todavía no se ha comenzado la negociación. Según ha apuntado, habrá habido «conversaciones pero no negociaciones», y ha indicado que, «hoy por hoy», no hay un «sí» a la investidura del secretario general del PSOE «en absoluto».
Iñigo Urkullu ha señalado que su relación con Pedro Sánchez podría ser mejor y ha precisado que no hablan desde el 14 de julio del año pasado, aunque sí se ha dirigido a él por escrito en unas «cuantas ocasiones», le ha enviado mensajes y Sánchez «hace acuse de recibo, sin entrar al fondo del contenido de los temas». «Por eso digo que podría ser mejor la relación», ha añadido.
Urkullu ha afirmado desconocer las razones de su falta de respuesta pero ha indicado que no será porque él no haya intentado ser «propositivo y positivo». Tal y como ha manifestado, ha tratado de ofrecer «vías de entendimiento con voluntad de acuerdo», por ejemplo en temas como el del cumplimiento del Estatuto de Gernika.
En este sentido, ha recordado que son la única comunidad autónoma en el Estado español que no ha renovado su propio Estatuto de Autonomía después de 44 años, y «además está pendiente de ser cumplido».
«Y no solamente que está pendiente de ser cumplido, sino que hay una preocupación constante por nuestra parte ante la búsqueda de la uniformización en el Estado español o lo que es la erosión silenciosa de nuestra capacidad de autogobierno», ha añadido.
El Lehendakari ha indicado que han logrado que, «sin entrar» en el calendario de transferencias, se atendiera un planteamiento que le hizo a Sánchez hace un año, el de reactivar una comisión bilateral de cooperación.
Según ha subrayado, de alguna manera, se ha «institucionalizado» el «sí» a la comisión bilateral de cooperación, aunque «no se ha puesto en marcha».
«Es llamativo cuando uno, además, es propositivo y no solamente para las cosas del autogobierno, no solamente para las cosas de Euskadi. Nosotros hemos convivido y compartido veintitantos domingos durante la pandemia con la llamada conferencia de presidentes y hemos ofrecido desde Euskadi vías de atención al conjunto de la sociedad del Estado español, desde la propuesta de los ERTEs o la de las actividades económicas que no podían paralizarse», ha manifestado.
También ha recordado su reciente propuesta de celebración de una Convención constitucional con el fin de «hacer un ejercicio de lectura mediante un diálogo sereno y sosegado».
Según ha recordado, hubo una respuesta del ministro de la Presidencia que trasladó que no era el «plan» del Gobierno, pero que «lo entendía», y ha añadido que también la vicepresidenta, Yolanda Díaz, se ha pronunciado diciendo que le parece interesante y ha anunciado que se quiere reunir con él para hablar de esta cuestión, aunque no ha recibido una comunicación directa al respecto.
PUIGDEMONT
Por otra parte, ha negado que le haya molestado que el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, haya ido a hablar con el expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, un encuentro que conocía.
El Lehendakari ha indicado que él tuvo «una relación muy fluida» con Puigdemont durante el procés y, ante sus reivindicaciones de cara a la investidura de Pedro Sánchez, ha señalado que «la realidad de Cataluña es propia» como lo es la de Euskadi, porque «son realidades diferentes».
«No entro en si tengo que estar de acuerdo o no estar de acuerdo. Yo he hecho una propuesta para el conjunto del Estado, no para Cataluña y no para Euskadi solamente, sino para el conjunto del Estado hace 20 días (sobre la Convención Constitucional). Yo entiendo que la realidad de Cataluña la tienen que gestionar desde Cataluña y que su realidad es propia, diferenciada», ha insistido.
Tras apuntar que en los últimos años no ha habido una comunicación entre Puigdemont y él, ha dicho que no quiere decir que no la tenga con la formación a la que representa, Junts.
Cuestionado por si está de acuerdo con la reivindicación de una amnistía, ha manifestado que, si desde el primer momento, dijo que «no había que judicializar «lo que correspondía al ejercicio de la política, está todo dicho».
«En aquel momento, cuando fue el momento culmen de la aplicación del artículo 155 de la Constitución Española, yo creo que algunos lo aplicaron y que otros que lo apoyaron deberían hacer un ejercicio de revisión también de lo que supuso también su aplicación», ha señalado
En esta línea, ha recordado que en todo momento abogó por el diálogo y por una relación que «trabajara por vías de acuerdo», pero «no pudo ser» y sigue pensando lo mismo, que no había que «haber judicializado lo que es el ejercicio de la política».
EUSKERA
En relación al uso de lenguas oficiales como el euskera en el Congreso de los Diputados, Urkullu ha aludido al respeto a la diversidad y ha señalado que el idioma es «el signo de identidad mayor de lo que es una identidad propia, una personalidad de un pueblo».
Según ha manifestado, el euskera es la lengua propia de los vascos, «compartida con el castellano, pero el euskera es la lengua propia». «¿Qué responsabilidad tendríamos de cara al futuro de la humanidad si quienes somos depositarios de una lengua que es propia nuestra la dejáramos morir, la dejáramos perder?», se ha preguntado.
A su juicio, no estarían siendo honestos con el propósito de la diversidad y del respeto a diversidad, sino que se caería en la «uniformidad». «Yo creo que no tiene mayor discusión que el amor a lo que es un signo de identidad, que es una lengua de tradición», ha destacado Urkullu, que ha señalado que es una lengua vehicular de relación entre personas que es «propia de un pueblo con sus rasgos de identidad diferenciados a los que puedan ser tan respetables de otros pueblos».