El Papa ha advertido este miércoles 10 de enero contra «tantos desequilibrios y patologías» relacoinados con la comida en referencia tanto a la bulimia y la anorexia como a la «glotonería» que convierte a los hombres en «depredadores».
En este sentdio, ha abogado por una relación más sana con la comida ante «enfermedades» que, a menudo, están «ligadas a la psique y al alma».
En la catequesis de la audiencia general de este miércoles, Francisco ha lamentado la relación distorsionada con la comida que se vive «especialmente en las sociedades llamadas opulentas, donde se manifiestan tantos desequilibrios y patologías» como la anorexia, la bulimia y la obesidad, donde «se come demasiado, o demasiado poco».
Para el Papa, comer es la «manifestación de algo interior». «La predisposición al equilibrio o a la desmesura; la capacidad de dar las gracias o la arrogante pretensión de autonomía; la empatía de quien sabe compartir la comida con los necesitados, o el egoísmo de quien lo acapara todo para sí», ha relatado.
«Dime cómo comes y te diré qué alma posees», ha sentenciado. En esta línea, ha subrayado que «la medicina y la psicología intentan atajar la mala relación con la comida».
En el aula Pablo VI del Vaticano, el Papa ha criticado el «vicio de la gula» y, en concreto, «la voracidad» hacia los bienes de la tierra que «está matando el planeta y comprometiendo el futuro de todos». Para el pontífice la gula es «quizás el vicio más peligroso», porque «la voracidad con la que nos desatamos, desde hace algunos siglos, hacia los bienes del planeta está comprometiendo el futuro de todos».
Así, ha afirmado que los hombres se han convertido sin darse cuenta en «consumidores». «El peligro es que nos estamos convirtiendo en depredadores, y ahora nos estamos dando cuenta de que esta forma de «glotonería» nos ha hecho mucho daño a nosotros y al medio ambiente en el que vivimos», ha concluido.