El PP someterá este martes a debate y votación del Pleno del Congreso su propuesta para suprimir el Ministerio de Consumo, que dirige Alberto Garzón, al considerar que resulta «inútil» y que sus competencias deberían repartirse entre Sanidad y Hacienda.
«Tenemos un Ministerio absolutamente inútil que pagamos todos los españoles y un ministro desocupado que se dedica a atacar a todos los sectores productivos», afirmó hace unos días la portavoz del Grupo Popular, Cuca Gamarra.
Los ‘populares’ registraron esta iniciativa antes de la última polémica protagonizada por Garzón tras su entrevista con el diario británico ‘The Guardian’ criticando la sostenibilidad y la calidad del producto de las granjas españolas de gran tamaño. Unas palabras que levantaron un reguero de críticas no sólo por parte del PP, Vox o Ciudadanos, sino también de los gobiernos autonómicos de Castilla y León, Castilla-La Mancha y Aragón, así como de las principales asociaciones agrarias.
EN PLENA CAMPAÑA EN CASTILLA Y LEÓN
Pero el primer partido de la oposición ha decidido incluirla en la primera sesión plenaria del nuevo periodo de sesiones, en plena campaña electoral en Castilla y León y aprovechando la resaca política que han dejado esas palabras de Garzón.
El PP sostiene que la mayor parte de las competencias en materia de Consumo están transferidas a las comunidades autónomas y que, por tanto, el de Garzón es un ministerio que carece de las mismas, como demuestra que sólo reciba un 0,014% del total de los Presupuestos para 2022 (65,76 millones).
«Queda patente, en consecuencia, que la prioridad que el Ejecutivo da a la protección de los consumidores en los PGE de 2022 es residual y que su objetivo no va más allá del gesto de mantener un ministerio más por razones estrictamente políticas», recalca en su iniciativa, recogida por Europa Press.
Su propuesta es que, «en el plazo máximo de un mes», el Gobierno elimine este Ministerio y adscriba al de Sanidad la Dirección General de Consumo y la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) y al de Hacienda la Dirección General de Ordenación del Juego.
«POLÉMICAS ESCANDALOSAS»
Pero, además, el PP desacredita la gestión de Garzón, al que acusa de «dejación de responsabilidades» en la protección de los consumidores. En concreto, le señala por protagonizar varias «polémicas escandalosas» que, lejos de «aportar un ápice» a la protección de los consumidores, han «dañado» la reputación de importantes sectores de la economía española.
A su juicio, su «irresponsable frivolidad» ha quedado patente, por ejemplo, con la campaña contra el sexismo en los juguetes que lanzó antes de Navidades. Según el PP, el también líder de Izquierda Unida ha pretendido «involucrar a los niños en una ‘huelga simbólica de juguetes’ en un momento muy duro para los consumidores españoles» con «la inflación desbocada».
EL AZÚCAR Y LA CARNE
Según el grupo parlamentario que dirige Cuca Gamarra, con tan sólo dos años en el cargo, Garzón tiene ya en su haber un amplio «historial de errores, meteduras de pata y actuaciones irresponsables», entre las que menciona sus «ataques» al turismo español o sus campañas contra el azúcar o la carne.
También critica que Garzón haya hecho una «defensa del ‘modelo de consumo cubano’, caracterizado por la miseria y cartilla de racionamiento». «Y finalmente –añade– ha dedicado sus mayores esfuerzo, copiando a Stalin, a presentar un ‘recetario de cocina’ innecesario y que promociona productos importados, cuando nuestra cocina mediterránea es puntera en el mundo».
Asimismo, el PP aprovecha para afearle que use su «estatus de ministro» para «atacar» a la Jefatura del Estado con «total deslealtad», saltándose su promesa de lealtad al Rey, y que haya «insultado de forma injusta y mendaz a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad el Estado afirmando que puede que «haya elementos reaccionarios» en su seno.