El precio de la vivienda nueva y usada se ha incrementado un 3,3% en enero con respecto al mismo mes de 2023, lo que supone la menor tasa de aumento interanual desde septiembre de 2021, según reflejan los datos del informe mensual de Tinsa publicado este martes.
En cambio, el precio de la vivienda ha registrado un ligero descenso del 0,1% entre enero y diciembre, confirmando el mantenimiento de los precios residenciales, según ha indicado la tasadora.
La directora del servicio de estudios de Tinsa, Cristina Arias, ha explicado que los precios residenciales se han mantenido estables de acuerdo con la desaceleración de las compraventas, principalmente como consecuencia de la contracción en el crédito hipotecario concedido.
La variación mensual de todos los grupos analizados se ha situado entre un descenso del 0,3% en las áreas metropolitanas y el aumento del 0,3% en las islas. En las ciudades grandes el precio de la vivienda se mantuvo sin variación.
En términos interanuales, todos los grupos mantienen su tendencia a la desaceleración de precios, a excepción del territorio insular, en donde los precios mantienen su tasa de crecimiento en niveles altos. Tinsa destaca Baleares y Canarias, con un precio medio un 8,9% superior al registrado en enero de 2023.
Arias ha apuntado que las compraventas en 2023 se han financiado en su mayoría con fondos propios, con un componente relevante de compraventas de extranjeros y un mantenimiento de la proporción de adquisiciones por parte de entidades jurídicas.
