El precio medio de los carburantes ha puesto fin esta semana a su tendencia bajista de los dos últimos meses, que había dado un respiro a los conductores a lo largo de este verano, y ha recuperado las subidas, con un repunte de hasta el 3,6%.
En concreto, el precio medio del litro de diésel ha subido esta semana un 3,63%, encadenando su segundo ascenso, para elevarse a los 1,882 euros.
Por su parte, el precio medio del litro de gasolina, que había sumado nueve semanas seguidas de caídas, se ha encarecido por primera vez desde finales de junio, con un incremento del 0,45%, para situarse en los 1,794 euros, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea recogidos por Europa Press.
De esta manera, ambos carburantes ponen esta semana definitivamente fin a la tendencia a la baja que venían registrando desde junio, cuando cortaron la espiral alcista que sufrían desde la invasión de Ucrania y Rusia, y que les llevó a caer hasta más de un 16%.
Este importe medio de ambos carburantes incluye los impuestos, pero no refleja el descuento que entró en vigor desde el pasado 1 de abril de al menos 20 céntimos por litro, ya que hay rebajas superiores, dependiendo de la petrolera y de las promociones a los clientes fidelizados.
Así, a pesar de este repunte en esta semana, contando con esa subvención, el precio del litro de gasolina sería de 1,594 euros, mientras que el del gasóleo se situaría en los 1,682 euros, en ambos casos claramente inferior a los que marcaba a finales de marzo, antes de la entrada en vigor de la ayuda –1,818 euros litro en el caso de la gasolina y 1,837 euros para el gasoil–.
A pesar del abaratamiento registrado a lo largo del verano, el precio de los carburantes registra un precio especialmente alto con respecto a los últimos años en estas alturas año.
UN 27% Y UN 50% MÁS CARO QUE HACE UN AÑO
De esta manera, con respecto a la misma semana de hace un año, el precio medio del litro de gasolina es un 27% más caro, mientras que en el caso del gasóleo se ha encarecido un 50%, aunque sin tener en cuenta la bonificación vigente actualmente.
Recogiendo la subvención, el precio del litro de gasolina es un 12,7% más caro que en la primera semana de septiembre, mientras que en el caso del gasóleo el precio es un 33,7% superior.
Estas cifras se registran en un entorno de precios elevados del crudo en el actual contexto, marcado por la guerra en Ucrania. No obstante, este jueves el barril de Brent, de referencia en Europa, cotizaba por debajo de los 95 dólares, mientras que el Texas americano se intercambiaba a 88 dólares.
El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos.
De este modo, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de la gasolina, sino que lo hace con un decalaje temporal.
NIVELES DE LA UE
Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por encima de la media de la Unión Europea, situada en 1,782 euros el litro, aunque no de la zona euro, con un precio medio de 1,838 euros.
En el caso del diésel, el precio en España es inferior al de la media de la UE, que es de 1,911 euros, y al de la zona euro, con un precio de 1,946 euros.
No obstante, incluyendo la bonificación de al menos 20 céntimos por litro el precio de ambos carburantes en España estaría por debajo de la media europea.