La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid, Soledad Ortega, encargada de investigar la muerte de la vecina de Traspinedo Esther López de la Rosa, tomará declaración este lunes, 25 de abril, en calidad de investigado al hoy principal sospechoso, Óscar S.M.
Así lo acordó la juez a través de una providencia puesta el pasado martes en conocimiento del citado Óscar, los también investigados Ramón J.G.F. y Lucio Carlos G.D. y la acusación particular, representada por Inés López de la Rosa, hermana de la víctima.
Junto a la citación, la instructora levantó parcialmente el secreto de sumario y dio traslado a las partes de las distintas actuaciones habidas hasta el momento, a excepción de 18 «acontecimientos» de un total de más de 600 que figuran en la causa.
Por contra, la juez levantó el viernes las medidas cautelares que persistían sobre la persona del investigado Ramón G, de forma que cuenta con vía libre para salir del territorio nacional si así fuera su deseo. De hecho, la juez ha ordenado la devolución de su pasaporte.
La decisión de la juez estimaba de este modo la pretensión de la letrada defensora de Ramón, el único de los tres investigados, además de Óscar S.M. y Lucio Carlos G.D, que hasta la fecha ha estado privado de libertad por esta causa en los primeros días desde que se iniciara la investigación.
De este modo, el foco de las pesquisas se focaliza ahora en Óscar S.M, la persona que, supuestamente, fue la que vio por última vez a la víctima la noche del 13 de enero de 2021 y que la trasladó en su vehículo hasta que ella se apeó, siempre según la versión facilitada a la Guardia Civil, tras discutir con ella porque pretendía seguir de fiesta y él prefería irse a casa.
Sin embargo, las diligencias de la Guardia Civil aluden a las «graves contradicciones» y «escasa credibilidad» de la versión ofrecida por Óscar S.M., tras comprobar que la hora facilitada en la que supuestamente dejó aquella madrugada a su acompañante no concuerdan con el posicionamiento posterior, en torno a las 3.22 y 3.26 horas, de los teléfonos móviles de ambos y del vehículo del investigado en las inmediaciones de su vivienda, en la urbanización El Romeral de Traspinedo.
El hallazgo de perfil genético del investigado, la víctima y de una tercera persona, no identificada, en la parte izquierda de la boca del maletero de su turismo, el hecho llamativo de que los móviles de Óscar y Esther pasaran a ‘modo avión’ coincidiendo prácticamente durante un periodo concreto en horas posteriores, el lavado del vehículo aquella misma mañana y los dos viajes que ese mismo día, por la tarde y por la noche, realizó el investigado desde Valladolid a su vivienda en Traspinedo forman parte de las numerosas sospechas que se ciernen sobre la persona de Óscar y su presunta implicación en la muerte de la joven.
También reflejan que Óscar «restó importancia» ante la alerta de los amigos, principalmente Lucio Carlos. «Resulta ilógico toda vez que Óscar era consciente del aislado paraje en el que supuestamente Esther se habría apeado del vehículo», dicen, desconfiando de su relato en sede policial.
Las diligencias que el Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid ha puesto ya en manos de las partes siguen apuntando al atropello y que el mismo no fue la causa de la muerte sino la hipotermia sufrida por la vecina de Traspinedo en las horas posteriores al impacto.
La Guardia Civil asume que Esther no se separó de su teléfono, ya que el terminal se localizó junto al cadáver –y su mochila– en la cuneta donde fue hallado el cuerpo. «Los posicionamientos y conexiones permiten aventurar que habría llegado junto a Óscar a bordo del vehículo de éste hasta la vivienda que dispone en la urbanización El Romeral de Traspinedo», apuntan.
Por todo ello, la Guardia Civil señala que «subsisten los indicios que refuerzan la posible implicación o grado de conocimiento de Óscar S.M. en las circunstancias de la desaparición y muerte violenta de Esther López de la Rosa».