Nos encontramos en un pueblo extraperiférico al sur del Distrito Federal, en México, y allí vemos caminando a Carlos y a Lucía, dos amigos que lo comparten todo: las risas, los juegos y, especialmente, los secretos. Sus vidas están intervenidas por la presencia sigilosa de la política, no solo por el entorno y la época en que habitan, sino porque los padres de ambos se dedican a esto. Sin embargo, en el decimocuarto cumpleaños de Carlos, todo da un giro repentino y las consecuencias para su amistad con Lucía serán devastadoras.
Una noche, ambos amigos acuerdan encontrarse en una casa deshabitada, pues tienen la convicción de que deben dar un paso importante en su relación, pero Carlos decide no ir, perdiendo de vista que su mundo como lo conocía se vendrá abajo. Al día siguiente, se entera de que Lucía ha desaparecido y las autoridades no parecen hacer lo suficiente para hallarla. Decidido a descubrir la verdad, Carlos emprende una aventura riesgosa en la búsqueda de su mejor amiga en la vida, esperando encontrarla sana y salva.
Con elementos propios de la narrativa del thriller, el escritor mexicano Pablo Berthely Araiza nos sumerge en esta novela vibrante, El silencio que nos une, para situarnos en la mente de su narrador, Carlos, mientras lucha por entender qué fue lo que ocurrió aquella noche.
A medida que avanzamos en las páginas, la historia adquiere matices mucho más amplios. De repente, ya no solo es un relato trepidante el que nos acoge, sino una panorámica más que interesante sobre la realidad de México a finales del siglo XX, un período en el que el país experimentaba una serie de cambios significativos y desafíos políticos y sociales.
Con buen tino, Berthely Araiza, galardonado con el Premio Nacional de Novela Jorge Ibargüengoitia en 2020, nos transporta al México de los años noventa para adentrarnos en una historia de amistad, crecimiento y secretos que cambiarán la vida de sus personajes para siempre.
Conforme los personajes más jóvenes crecen y buscan una identidad propia, los más adultos parecen ocultar secretos y lógicas cínicas que reflejan el mundo institucional que los rodea. De acuerdo al blog Sucede Leyendo, la novela desentraña temas profundos y complejos, como el ocultamiento, la violencia y la traición, lo que la convierte en una obra literaria profundamente reflexiva.
En las páginas de El silencio que nos une, el autor nos presenta una estructura interesante para el desarrollo de la trama, en forma de fichas escritas a máquina, y a medida que avanzamos en la lectura, la trama se encarga de revelar la procedencia de estas fichas. Esta estructura narrativa agrega una capa adicional de misterio a la historia y nos desafía a explorar la vida de los personajes desde múltiples perspectivas.
A través de las fichas escritas a máquina, la novela también plantea preguntas filosóficas y existenciales que resuenan en las conversaciones entre los jóvenes personajes y nos llevan a cuestionar temas como el amor, el miedo y la lealtad.
El silencio que nos une es una novela experimental cuya visión del mundo supone una mirada estrictamente contemporánea, escrita con rigor por un autor que va dando buenos pasos en el panorama actual de la literatura de su país. Aquí, la habilidad de Pablo Berthely Araiza para crear una narrativa apasionante es innegable, así como su capacidad para tejer una historia que refleja la realidad política y social de México en una época imposible de olvidar.
