El fundador y consejero delegado de Tesla, Elon Musk, ha presentado una contrademanda confidencial contra Twitter después de que la compañía lo demandara por rescindir el acuerdo de compra de la plataforma por un valor de 43 millones de euros a principios de julio, según ha informado ‘The Wall Street Journal’.
La contrademanda del magnate servirá para señalar que Twitter no respondió cuando preguntó por el número de cuentas falsas que existían en la red social y cuál era el modo de la red social para localizarlas y eliminarlas, según ha señalado el equipo legal de Musk.
Asimismo, el citado diario ha recogido que es «probable» que el fundador de Tesla afirme que la compañía cambió la cantidad de usuarios activos diarios monetizables antes de que concretara el acuerdo entre ambas partes, lo que habría cambiado el precio de compra de la red social.
El equipo jurídico de Musk ha asegurado anteriormente que Twitter habría violado su acuerdo por varios motivos, incluido que la compañía había despedido a dos ejecutivos y, por lo tanto, había incumplido el acuerdo.
Por otra parte, el juicio por la demanda de Twitter contra el magnate se celebrará el próximo 17 de junio y durará cinco días, tal y como ha informado una jueza de Delaware y ha podido saber la cadena estadounidense CNN.
La jueza Jude McCormick, que supervisa el caso, ha dado la orden para celebrar el juicio a mitad de octubre diez días después de adelantar que el proceso tendría lugar en tal mes, aunque sin especificar el día.
Celebrando el juicio en octubre, McCormick ha dado la razón a la compañía, que había pedido «acelerar» el juicio, aunque finalmente no tendrá lugar en septiembre como en un principio había defendido el equipo legal de Twitter, alegando que el acuerdo para comprar la compañía debía ser antes del 24 de octubre.
El pasado 9 de julio, el magnate trasladó a Twitter que renunciaba al contrato de compra de la red social después de no recibir respuesta por parte de la compañía al pedir información sobre el número de cuentas falsas que se encuentran en la plataforma, así como la manera de la empresa de auditar y suspender las mismas.
Días más tarde, Twitter presentó ante un tribunal del estado de Delaware una demanda contra el multimillonario para obligarle a comprometerse con su oferta de compra de la empresa tras romper el acuerdo entre las partes.
«Musk aparentemente cree que él, a diferencia de cualquier otra parte sujeta a la ley de contratos de Delaware, es libre de cambiar de opinión, destrozar a la empresa, interrumpir sus operaciones, destruir el valor de los accionistas», dijo la compañía, tal y como recogió la cadena NBC News.
A mediados de mayo, el magnate había decidido suspender temporalmente la compra de Twitter, pactada a finales del pasado mes de abril por unos 44.000 millones de dólares (43.620 millones de euros), a la espera de detalles que respaldaran el cálculo de la compañía de que las cuentas falsas representan menos del cinco por ciento de los usuarios.
Posteriormente, mediante una carta remitida a principios de junio por los abogados de Musk a la Comisión del Mercado de Valores (SEC) de Estados Unidos, el equipo legal del multimillonario consideraba la posición de Twitter un «incumplimiento sustancial» de sus obligaciones en virtud del acuerdo de fusión, por lo que advertían de que Elon Musk «se reserva todos los derechos resultantes, incluido su derecho a no consumar la transacción y su derecho a rescindir el acuerdo de fusión».