Elon Musk ha vuelto a hacer noticia tras una nueva excentricidad: ha cambiado el nombre de Twitter a ‘Titter’ en las oficinas centrales de San Francisco.
El magnate ha decidido pintar la ‘W’ del letrero de la marca y todo se debe a una especie de disputa contra su arrendador del lugar.
A través de un tuit este domingo, Musk publicó una imagen del letrero con la W pintada en blanco para que se camuflara con el fondo.
«Nuestro arrendador en SF HQ dice que estamos legalmente obligados a mantener el letrero como Twitter y no podemos eliminar la ‘w’, así que lo pintamos de color de fondo. ¡Problema resuelto!», se lee.
Días antes, había intentado no solo pintarlo, sino ocultarlo completamente. William LeGate, empresario y programador, tuiteó una imagen del letrero en esta situación.
«Elon Musk, en una notable demostración de madurez, eliminó la W del logotipo de Twitter fuera de su sede en San Francisco», señalaba.
Los desacuerdos sobre el letrero de Twitter son los últimos en la disputa de larga data entre Musk y el propietario del edificio.
SRI, compañía que lleva el control del recinto, demandó a Twitter en enero. La demanda acusaba de no pagar el alquiler de aproximadamente 3,4 millones de dólares al mes en diciembre y enero por las instalaciones de la sede.
Después de los despidos masivos en la red social, Twitter redujo su presupuesto a cifras cercanas al cero.
En Seattle, por ejemplo, ya no existe servicio de limpieza y seguridad. Los propios empleados que han quedado están llevando su propio papel higiénico al trabajo. El personal de limpieza y seguridad también fue despedido de las oficinas de la empresa en Nueva York y San Francisco, donde los trabajadores se declararon en huelga por salarios más altos. En San Francisco, Musk condensó la huella de la compañía en 650 California Street de cuatro pisos a dos, informó el Times.
