a emergencia climática, la pérdida de biodiversidad, la deforestación, la contaminación de enclaves como el Mar Menor, los plásticos, la salida ecosocial de la crisis del coronavirus, son algunos de los principales problemas que ONG ambientales han denunciado este 2021 y que seguirán en 2022.
Para Ecologistas en Acción, uno de los retos para 2022 ha de ser «recuperar la salud y la calle» para atender tanto a la salud de las personas como del planeta y afrontar los retos ‘ecosociales’ a los que reclama una respuesta desde un enfoque de justicia social y equidad.
La ONG denuncia que la calidad del aire, aunque ha mejorado en 2021, sigue provocando «decenas de miles de muertes» en España en un país en el que «tampoco es muy saludable» el agua que se bebe o la que está en los ríos; los alimentos que se consumen por un modelo agrario que no está pensado para alimentar de forma saludable a la población; o una gestión de residuos que se sitúa cerca de las poblaciones más empobrecidas.
Ecologistas expone que la pandemia ha mostrado como la salud del planeta está ligada a la de las personas y que pérdida de biodiversidad y cambio climático están detrás del aumento de enfermedades infecciosas, del aumento de desplazamientos forzados, de la pérdida de alimentos o de las muertes por el aumento de eventos climáticos extremos.
Por ello, para 2022 ve fundamental revertir la pérdida de biodiversidad, mitigar el cambio climático, cambiar el modelo agrario hacia la agroecología, recuperar los espacios naturales como el Mar Menor y evitar la deforestación, dejar los combustibles fósiles bajo la tierra, acabar con el exceso de residuos y eliminar todo lo que no sea biodegradable.
Entre sus prioridades para el nuevo año, quiere «recuperar la calle» ante la incapacidad de los Gobiernos para tomar medidas ambiciosas y contundentes sobre cambio climático y biodiversidad.
Por otro lado, recuerda su «decepción e indignación» por los acuerdos finales de la COP26 que ha aplazado las medidas y la financiación que son necesarias. En cuanto a la transición energética, la ONG reclama una implantación renovable justa y compatible con la conservación de la biodiversidad.
En la parte de buenas noticias, la ONG celebra que en 2020 y 2021 cerraron casi todas las centrales de carbón por lo que ve «muy cerca» el fin de este combustible fósil en España.
Ecologistas recuerda que tras la aprobación de la Ley de Cambio Climático el pasado mes de mayo, las ciudades de más de 50.000 habitantes tendrán que poner en marcha su zona de bajas emisiones antes de 2023 y celebra que «tras muchos años de activismo, por fin» se ha conseguido la «tan ansiada» protección del lobo con su inclusión en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESRPE).
COP26 DECEPCIONANTE
Desde Greenpeace, su directora ejecutiva, Eva Saldaña, ha destacado a Europa Press que entre las peores noticias ambientales de 2021 están los efectos del cambio climático, cuyos impactos ya se observan con mayor frecuencia e intensidad y la pérdida de biodiversidad, mientras los políticos en la COP26 siguieron son dar «los pasos ambiciosos que requiere la humanidad».
Así, expone que 2021 comenzó con la posibilidad de reorientar la recuperación económica hacia una verde y justa con los fondos europeos pero señala que España va «con retraso en todo».
No obstante, a su juicio el 2021 deja también buenas noticias como el «leve pero creciente» movimiento en contra de la ganadería industrial porque la población «empieza a entender» que afecta al mundo rural y al agua, un recurso cada vez más escaso» y celebra que en Castilla y León se empieza a ver «alguna moratoria» a nuevas explotaciones.
Además, celebra que la energía eólica «ha superado con creces» la aportación de la energía nuclear y que han prosperado litigios climáticos en todo el mundo, al tiempo que «nunca se hubiera imaginado» que la Agencia Internacional de la Energía aconsejara dejar de subvencionar a los combustibles fósiles o que consejos de dirección como Epson y otras petroleras empiezan a ir «en otra dirección». En España, recuerda que la demanda contra el Estado presentada por las ONG sigue su curso.
Respecto a la decepcionante COP26, valora que se ha vislumbrado «el primer paso importante» para el fin del carbón y que se ha mantenido vivo el objetivo de limitar la temperatura global del planeta en 1,5ºC a final de siglo.
PREOCUPANTE SITUACIÓN DE LAS AVES
Por su parte, SEO/BirdLIFE refleja que 2021 empezó con el manto «muy blanco» de ‘Filomena’ que hizo pensar en un cambio de clima y termina con la alerta roja por la «preocupante» situación de millones de aves en España.
Entre los principales hitos de 2021, la ONG celebra que este ha sido un año «repleto de ciencia» que muestra como más del 50 por ciento de las especies en España tiene problemas de conservación por lo que reclama planes adecuados de gestión para la biodiversidad.
Por otro lado, la ONG pide declarar Parque Nacional los Monegros, por su importancia para las aves esteparias y para que el ambiente agroestepario esté representado en la red de parques nacionales. Otro ecosistema amenazado son los humedales y, en ese sentido, SEO/BirdLife pide declarar en riesgo de desaparición las lagunas costeras como el Mar Menor, dada la «extrema gravedad de su situación».
Igual que Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife pide diálogo social para lograr un despliegue responsable de las energías renovables. Junto con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la ONG ha creado un foro de soluciones a este problema.
Respecto a la COP26, celebra que la cumbre ha marcado la diferencia al contar con la naturaleza como «un aliado fundamental» para atender la emergencia climática, pero lamenta que se ha quedado lejos de marcar compromisos para lograr el objetivo de París y detener la alarmante pérdida de biodiversidad.
No obstante, para la ONG el reconocimiento en octubre del medio ambiente como un derecho humano esencial por Naciones Unidas permitirá que próximamente se debata su inclusión como derecho humano universal.