La pasada madrugada ha entrado en vigor el toque de queda entre la 1.00 y las 6.00 horas en 141 municipios de Navarra que se encuentran en situación de riesgo muy alto por Covid-19, es decir, que presentan una incidencia de más de 250 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días o más de 125 casos en 7 días. La medida afecta aproximadamente a 600.000 personas, la mayoría de la población de Navarra.
El toque de queda se aplicará durante los fines de semana, en festivos y en las fechas (incluidas las vísperas) en las que hubiera correspondido celebrar las fiestas patronales, tal y como autorizó el viernes el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN).
Inicialmente, el TSJN había rechazado esta misma semana el toque de queda solicitado por el Gobierno foral para todos los días de la semana en los municipios en riesgo muy alto. El Tribunal consideró que el Gobierno foral debería haber identificado las localidades afectadas así como los datos concretos de contagios.
Tras ello, el Gobierno foral emitió una nueva orden foral que sí ha sido autorizada por el TSJN. En el auto, la Sala de lo Contencioso-Administrativo considera eficaz la medida para contener la propagación del virus porque va a impedir la interacción social que se produce en esa franja horaria.
«Junto a ello va a resultar imprescindible para evitar los encuentros sociales que se vienen produciendo de manera generalizada en las principales localidades navarras, pero también en otras de menor población; los llamados ‘botellones’, encuentros en los que por una posible relajación de las medidas preventivas frente al virus se han convertido en el origen de una parte importante de los contagios entre menores de 15 a 30 años, tal y como informa la jefa de rastreo en su informe», sostiene la Sala.
En las localidades afectadas por el toque de queda, desde la madrugada de este sábado hasta las 00 horas del 30 de julio, únicamente se podrá circular durante esas horas nocturnas para actividades como la adquisición de medicamentos y productos sanitarios y otros bienes de primera necesidad, asistencia a servicios sanitarios y veterinarios, cumplimiento de obligaciones laborales o legales, cuidado de personas vulnerables, repostaje en gasolineras para la realización de las actividades citadas hasta ahora, y por causa de fuerza mayor o situación de necesidad.
De los 141 municipios que se encuentran en riesgo muy alto, tres tienen una incidencia acumulada a los 14 días de más de 10.000 casos. Se trata de Azuelo (12.903,22), Orbara (12.121,21) y Lesaka (11.601,60). Con una incidencia de entre 5.000 y 10.000 casos se encuentran Igantzi (6.572,76), Urroz (6.010,92) y Zubieta (5.280,52).
Los municipios que presentan una incidencia entre 3.000 y 5.000 casos a 14 días son Saldias (4.918,03), Arantza (4.690,11), Ituren (4.500,97), Etxalar (4.059,04), Doneztebe (3.418,30), Lantz (3.378,37), Bera (3.292,29) y Areso (3.225,80). Finalmente, entre 1.000 y 3.000 casos se encuentran 43 municipios y con menos de 1.000 casos, 84.
En los municipios con mayor población de Navarra, la situación es la siguiente: Zizur Mayor (1.174,96), Aranguren (1.114,28), Estella (1.093,41), Berriozar (1.045,46), Burlada (989,73), Noáin-Valle de Elorz (985,57), Ansoáin (969,26), Pamplona (927,83), Barañáin (871,33), Berrioplano (826,90), Baztan (797,22), Valle de Egüés (780,95), Villava (725,20), Tafalla (566,30), Tudela (526,78) y Alsasua (322,45).